¿Diez mil pasos al día = estar en forma? Caminar también debería ser científico
Al principio, 10.000 pasos al día. El concepto fue propuesto por una empresa japonesa que desarrolló un podómetro para los Juegos Olímpicos de Tokio de 1964.
En nuestro país, este lema fue propuesto por el departamento de salud, pero son diez mil pasos. Se diferencia de los ejercicios físicos habituales destinados a mejorar la condición física como la aptitud cardiorrespiratoria, la resistencia y la fuerza.
El departamento de salud recomienda entre 6.000 y 10.000 pasos por día para equilibrar la dieta y el ejercicio y evitar síntomas secundarios como la sobrenutrición, el sobrepeso y la obesidad debido a la mejora de las condiciones de vida.
No hay duda de que moverse es mejor que estar sentado todo el día.
Sin embargo, no creas que caminar 10.000 pasos al día equivale a emprender con éxito el camino hacia la salud. De hecho, el ejercicio aeróbico necesita alcanzar una cierta intensidad para lograr el efecto de promover la salud.
Además, si caminas 10.000 pasos y aún así comes y bebes para compensarte, no sólo será en vano, sino que también puede afectar tu salud.
¿Cuáles son los beneficios de caminar regularmente?
1. Reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares
Caminar siempre se ha considerado el ejercicio más suave. Muchos estudios han demostrado que caminar todos los días puede mejorar la función cardiopulmonar, promover la circulación sanguínea en el cuerpo y reducir el riesgo de accidente cerebrovascular y ataque cardíaco.
2. Fortalecer el organismo y favorecer el metabolismo.
Los resultados de un estudio americano demuestran que caminar media hora al día, 6 días a la semana, no sólo puede mantener una buena figura, sino también reducir los efectos adversos del síndrome metabólico. Los resultados del estudio se publicaron en el American Journal of Cardiology en diciembre.
3. Beneficios para otros aspectos del cuerpo
Caminar puede reducir la posibilidad de hipertensión arterial u obesidad; mejorar el índice de colesterol; los músculos fuertes son más propicios para los ejercicios de piernas y abdominales; Reduce la tensión y el estrés; ayuda a aliviar el dolor de la artritis, mejora la salud ósea y previene las caries.
Caminar es una actividad sencilla y fácil de la vida diaria y básicamente no está restringida por la edad, la condición física o la ubicación. Caminar puede ejercitar moderadamente los músculos y articulaciones de todo el cuerpo. Aunque la cantidad de ejercicio no es grande, es muy beneficioso para la salud y también puede aliviar el estrés y la tensión. Sin embargo, algunas prácticas inadecuadas al caminar pueden tener efectos adversos en la salud. Estas prácticas inadecuadas incluyen principalmente las siguientes:
1. Salir a caminar inmediatamente después de una comida. No es recomendable salir a caminar dentro de los 30 minutos posteriores a una comida, porque justo después de comer, el flujo sanguíneo del cuerpo se concentrará en el estómago para digerir los alimentos. Si comienza a hacer ejercicio en este momento, fluirá más sangre a los huesos y músculos, lo que reducirá el suministro de sangre al estómago, lo que fácilmente puede causar indigestión.
2. Camina con el pecho en alto. Cuando el tórax está involucrado, el espacio estirado de los pulmones se comprimirá y la respiración se acortará, lo que afectará fácilmente la función cardiopulmonar. Con el tiempo, la respiración se volverá cada vez más superficial y se escupirá antes de ingresar a los pulmones, lo que no favorece el suministro de oxígeno al cuerpo. Al mismo tiempo, si la espalda se inclina hacia adelante o hacia atrás, el cuerpo perderá el equilibrio y ejercerá una presión adicional sobre la zona lumbar, lo que fácilmente puede causar dolor en las articulaciones. La forma correcta es caminar con la cabeza en alto y la espalda ligeramente hacia atrás. El colapso puede prevenir el dolor de hombros, cuello y espalda. Mire de 3 a 6 metros hacia adelante.
3. Traer demasiadas cosas. No sostengas demasiadas cosas en tus manos al caminar. Cargar demasiado peso puede provocar lesiones en el hombro y el antebrazo.
4. Agua potable insuficiente. Mientras camina, beba al menos un vaso de agua cada 30 minutos. Puedes sostener la taza en tu mano o guardarla en tu bolsillo.
5. Caminar rápido y detenerse repentinamente. Lo mejor es empezar a caminar lentamente durante 5 minutos. Esto aumentará el flujo sanguíneo a los músculos de las piernas y calentará gradualmente la sangre. Después del ejercicio de calentamiento, puedes acelerar gradualmente para aumentar el consumo de energía. De cinco a 10 minutos antes del final de la caminata, deberá volver a caminar lentamente para permitir que su cuerpo se enfríe gradualmente. Si deja de hacerlo repentinamente, toda la sangre adicional se bombeará a los músculos de las piernas y al corazón, lo que le provocará mareos y calor.
6. Caminar demasiado. Si caminas todos los días, utiliza la longitud de zancada que te resulte más cómoda. Si caminas rápido, la longitud de la zancada puede ser un poco más larga, pero es mejor no afectar el aterrizaje natural de los pies, porque al caminar con zancada larga, los muslos suelen impulsar las pantorrillas, lo que hará que los pies caigan. Caiga pesadamente al suelo y emita un sonido de golpe. Al caminar en esta postura, la fuerza de amortiguación de las plantas de los pies empeorará y es fácil que se produzcan lesiones en las articulaciones de las rodillas.