¿Cómo dan las familias de clase trabajadora a sus hijos una educación de alta calidad?
La educación de los niños es un proyecto complejo que dura más de 20 años. La clase trabajadora en general debe prestar especial atención a la educación de sus hijos, allanando el camino y sentando una base sólida para el futuro de sus hijos.
1. Haz tu mejor esfuerzo para apoyar económicamente. Recuerdo que cuando estaba en la escuela primaria, había dos frases en la pared en la puerta de la escuela que todavía están frescas en mi memoria: No importa lo difícil que sea, no podemos lastimar a nuestros hijos, no importa lo pobres que seamos; No podemos permitirnos la educación. Las familias no pueden ser tacañas con el dinero cuando se trata de educación. Ganar en la línea de salida es una palabrería sin inversión financiera. Afortunadamente, la economía del país se ha desarrollado rápidamente en los últimos años y las familias básicamente han escapado del umbral de pobreza. Los gastos de educación básica de nueve años de educación obligatoria no necesitan ser asumidos por la familia.
2. Cuidado y estímulo emocional. Algunas familias sólo saben utilizar el dinero, pero ignoran la educación psicológica e ideológica de sus hijos. Debemos poner los factores emocionales en primer plano para llevarnos bien con nuestros hijos, y acompañarlos en cada momento de su crecimiento, para que los niños realmente puedan experimentar este tipo de apoyo emocional en la familia. Por ejemplo, escuche activamente a sus hijos en lugar de darles órdenes, advertencias y persuasiones, y utilice la esperanza para sus hijos en lugar de culparlos y ordenarlos. Anímate más, comunica más y apoya más a tus hijos. Una vez, la Universidad de Harvard realizó un estudio y descubrió que sólo un factor tiene un impacto en los logros futuros de los niños: la armonía familiar. Los padres no pelean entre sí, se comunican pacientemente con sus hijos en pie de igualdad y resuelven los problemas mediante la discusión, lo que puede estimular el sentido de pertenencia de los niños.
4. Desarrollar hábitos en el aprendizaje. Se deben cultivar cuatro buenos hábitos en los niños. Una es aprender activamente el hábito de no postergar las cosas. Haga planes, establezca tareas y complete tareas de aprendizaje a tiempo. El segundo es el hábito de previsualizar las nuevas lecciones y revisar las antiguas. Por ejemplo, lea con anticipación durante las vacaciones de invierno y verano y otros días festivos. Mientras aprende los siguientes textos, revise el contenido anterior para evitar que los niños aprendan cosas nuevas y olviden las antiguas. El tercero es el hábito de preguntar sin dejar preguntas. Algunos niños no se atreven a preguntarle al maestro en la escuela. Debemos alentarlos a que hagan preguntas activamente y luego recompensarlos, o dejar que el maestro les haga más preguntas. El cuarto es el hábito de escuchar atentamente las clases y no holgazanear. Esto es para cultivar la concentración de los niños y garantizar la eficiencia del aprendizaje.