¿Qué líderes de empresas estatales ha visto jugando una mala pasada?
En primer lugar, hacer algo bien muchas veces está fuera de lugar. Algunas personas saltarán a su jefe inmediato después de salir del trabajo y reportarán directamente al jefe de su jefe. Si se encuentran con un subordinado así, su jefe definitivamente no estará contento, por lo que utilizará este método para castigarlos.
Es posible que guarden silencio y te dejen decidir. Sabes que saben algo mejor, pero no emiten ningún sonido. ¿No me vas a saltar? Entonces podrás verlo por ti mismo. Si está mal, está bien. Te daré el problema de inmediato. Si su líder le dice algo, no lo tome en serio y no crea que significa la confianza del líder. A menos que la evidencia sea real y válida. De lo contrario, el liderazgo parece confiar pero tolerar los errores.
En segundo lugar, muchos líderes tienen una mentalidad estrecha y, sin darse cuenta, reprimen a algunas personas que podrían reemplazarlos. Tienes que saber que el lugar de trabajo es como un campo de batalla y que algún día podrías abrumar a tu líder. Por lo tanto, en este momento, los líderes utilizarán algunos medios invisibles para reprimir a algunas personas que fácilmente pueden amenazarse a sí mismas.
El método de represión suele ser confiarle una gran responsabilidad y luego observar cómo comete errores. Durante este período, la carga de trabajo aumenta continuamente, lo que se denomina formación. Al mismo tiempo, acudirá a sus superiores para decirles cosas buenas sobre sus subordinados. Como resultado, es posible que al final ni siquiera tenga la oportunidad de convertirme en un empleado de tiempo completo. Los líderes parecen tener la tarea de cultivarlos y confiarles responsabilidades importantes, pero las tareas adicionales no son de cultivo, sino que están fuera de lugar y esperan estar ocupados.
Además, las personas y los empleados tienen rutinas contradictorias, y también hay personas contradictorias en el lugar de trabajo, pero como líder, él tiene poder absoluto. Si ven a alguien que pueda amenazar su puesto, pueden enviarlo como asistentes. En este caso, parece que los subordinados reciben ayuda adicional, pero en realidad están siendo monitoreados o incluso una bomba de tiempo.
Si tu líder tiene esta tendencia, lo mejor es proponer quién será asignado para ayudar, para evitar la posibilidad de que el líder se confunda. Después de todo, las personas que conoces trabajan juntas de manera más efectiva.