No quiero durar para siempre, solo quiero tenerlo.
Siempre es porque nos encontramos sin darnos cuenta en el mundo de los mortales. Solo por una mirada casual hacia atrás, lo grabamos en nuestros corazones. Todos dicen que nos amamos no por la eternidad, sino por lo que una vez tuvimos. Érase una vez, al mar le resultaba difícil cambiar, pero el ámbar eterno se atrevió a ser persistente contigo sólo cuando las montañas y los ríos se agotaron y el cielo y la tierra estaban en armonía.
Una vez que nos encontremos, creará un amor para toda la vida. Debido al destino, nos encontramos con el mundo mortal. El destino es algo mágico. Nunca pensé que nos encontraríamos y entraríamos en el corazón del otro. El encuentro es destino y anhelo inolvidable. Es lo más hermoso y hermoso que hay en nuestros corazones. El amor es comprensión tácita debido a la comprensión; el amor es porque nos entendemos y nos apreciamos unos a otros. Cuando el corazón escucha, las preocupaciones se aliviarán; cuando las emociones respondan, el afecto familiar se calentará. El lenguaje no es hermoso, pero es el más cálido; los sentimientos no son cálidos, sino íntimos.