Ayude a encontrar prosa y poesía sobre la infancia de escritores literarios famosos.
Risas
El sonido de la lluvia se detuvo gradualmente y una luz clara salió débilmente de detrás de las cortinas. Abre la ventana
Mira, ¡ah! Las nubes frías se han dispersado y las gotas que quedan en las hojas, reflejando la luna, son como miles de luces fluorescentes, parpadeando y moviéndose. ——¡Nunca esperé que después de Bitter Rain y Lonely Deng, hubiera una imagen tan hermosa
!
Al estar un rato junto a la ventana, sentí un poco de frío. Al darme vuelta, de repente me deslumbraron. Todo lo demás en la habitación estaba oculto en la nube de luz; solo el Ángel en el cuadro de la pared estaba sumergido en la tenue luz. ——Este ángel vestido de blanco sostiene flores, extiende sus alas y me sonríe levemente.
"Esta sonrisa parece haber sido vista en algún lugar antes. ¿Cuándo..."
Sin saberlo, me senté debajo de la ventana y pensé, pensando en silencio.
La cortina bien cerrada de mi corazón se abrió lentamente y surgió una impresión de hace cinco años.
——Un camino antiguo muy largo. El barro bajo las patas del burro estaba resbaladizo. El agua de la zanja gorgotea. Los árboles verdes del pueblo cercano estaban todos envueltos en humo húmedo. La luna creciente en forma de arco cuelga de las copas de los árboles. Mientras caminaba, parecía haber un niño al costado del camino, sosteniendo un montón de cosas blancas brillantes. El burro pasó y accidentalmente miró hacia atrás. ——Estaba sosteniendo flores, descalzo, y me sonrió levemente.
"¡Es como si hubiera visto esta sonrisa antes en alguna parte!" Todavía pensaba, en silencio
pensé.
Emergió otra cortina interior, que se abrió lentamente, y surgió una impresión de hace diez años.
——El agua de lluvia bajo los aleros de paja cayó sobre la ropa gota a gota.
Las burbujas de agua al lado de los escalones de tierra giraban. Las hileras de trigo y los emparrados de uvas frente a la puerta están todos empapados de colores frescos y son de un amarillo y un verde muy brillantes. ——
La lluvia finalmente aclaró, así que caminé apresuradamente cuesta abajo
. Cuando vi la luna salir del mar, de repente recordé que había olvidado algo.
Me detuve y me di la vuelta. La anciana de esta cabaña... estaba apoyada contra la puerta, sosteniendo flores y sonriéndome levemente.
Las mismas expresiones sutiles son como telarañas, revoloteando juntas,
enredadas.
En ese momento, mi corazón estaba brillante y claro, como si hubiera ascendido a un país de hadas o hubiera regresado a mi ciudad natal. Las tres sonrisas que aparecieron frente a mis ojos se fundieron temporalmente en la armonía del amor y se volvieron confusas.