Poesía de maestra de preescolar sol de amor
Jingle infantil que alaba a los maestros
En la pura tierra santa de la educación preescolar,
los maestros de jardín de infantes florecen silenciosamente como flores sin nombre.
La fragancia tranquila y elegante,
como el dulce de leche,
nutre el corazón de cada niño.
Como el sol brillante,
ilumina la dirección del progreso de los niños.
Este es nuestro maestro de jardín de infantes,
dedicado a su trabajo, dedicación desinteresada,
llenando el corazón de los niños con el sol del amor.
Trabajando duro en la oscuridad,
promueve el crecimiento saludable de las plántulas.
Prestar la misma atención al cuidado y la enseñanza, y esforzarse siempre por lograr una calidad de primera clase,
es la búsqueda incansable de nuestros maestros de jardín de infantes.
Ser proactivos, pioneros e innovadores
es el eterno ideal de nuestros profesores de infantil.
Los maestros de jardín de infantes son geniales y gloriosos.
¡Los maestros de jardín de infantes son el sol que nunca se pone en el corazón de los niños!