El pinyin de Qiangbian
Argumento fuerte (qiang bian).
Debatir se trata de usar un lenguaje exquisito para ganar a los demás. Lo mismo ocurre cuando se debate con tu oponente. Si quieres conquistar a su oponente, primero debes conquistar su corazón, descubrir cuidadosamente su carácter y comprenderlo. los puntos clave. ¡Solo dando en el clavo podrás derrotarlo con éxito! ¡Aquí están las técnicas de debate que el editor ha recopilado para ti!
1. plantear un dilema. Si planteas una pregunta de dilema, no importa cómo responda la otra persona, caerá en la trampa. Pero debes captar el tema del debate y no desviarte del tema.
2. Ataca el escudo con una lanza. Es decir, aprovechar la contradicción entre los argumentos y los argumentos del oponente, aprovechar la contradicción entre los miembros del equipo del oponente, perseguir constantemente al oponente y obligarlo a seguir de cerca a nuestro lado.
3. Preguntas simples y significados profundos. Es decir, las preguntas son simples, pero profundas y relevantes para el debate. Asegúrate de hacer las preguntas más profundas en el lenguaje más conciso para que tu oponente no pueda responder rápidamente y se sienta abrumado.
4. Preguntas apasionadas. Utilice el método de sugestión psicológica para golpear directamente la capa emocional del oponente, excitándolo y desencadenando un vínculo emocional, abrumando así la razón del oponente. Pero tenga cuidado de no realizar ataques personales y no sea desordenado.
5. Mencione cosas familiares. A menudo no prestan atención a las cosas que les rodean con las que están familiarizados, o están muy familiarizados con ellas pero sólo las conocen pero no comprenden los detalles. Por lo general, al hacer este tipo de preguntas es fácil que la otra parte caiga en la pasividad.
6. Interrogatorio repetido. Si la otra parte evita una pregunta que la otra parte debe responder, la otra parte puede hacer la pregunta repetidamente, pero generalmente no más de tres veces, y no se permiten preguntas ilimitadas, lo que tendrá el efecto negativo de no tener preguntas que hacer. o aburrir a la audiencia.
7. Una estrategia dilatoria. En la vida diaria se puede observar la siguiente situación: cuando los bomberos reciben una llamada de auxilio, normalmente responden en un tono lento. Este tono suave tiene como objetivo estabilizar las emociones del hablante para que la otra parte pueda explicar la situación correctamente.