La señora Abe habló en el funeral: Desayunamos juntos el día del incidente. ¿A qué otros detalles del funeral vale la pena prestar atención?
La señora Abe está bien protegida por Shinzo Abe. Desde la muerte de Shinzo Abe, la señora Abe ha envejecido varios años. Su cara está cansada y las arrugas parecen muy evidentes. Antes de que Shinzo Abe fuera incinerado, la señora Abe apoyó su rostro en el ataúd para despedirse de su marido. Después de la cremación, siguió sosteniendo la urna, casi sola, despidiéndose de su marido muerto a su manera, soportando todo el tiempo el dolor de perder a su marido. Después de la cremación, Abe será enterrado en el cementerio de Abe en su ciudad natal, donde también se encuentra la tumba del padre de Abe.
En la ceremonia de despedida, la señora Abe recordó el día en que murió su marido. La señora Abe afirmó que todo ocurrió tan repentinamente que no hubo tiempo para reaccionar. Parece un sueño. Por la mañana desayuné con mi marido y luego envié a mi marido Shinzo Abe. Poco antes del mediodía, la señora Abe se enteró de que habían disparado a su marido, Shinzo Abe. A la señora Abe le dijeron que no se lo dijera a su suegra Yoko todavía, pero la noticia del tiroteo de Abe continuó transmitiéndose por televisión.
Aunque la señora Abe no se lo contó a su suegra, ésta se enteró de la muerte de su hijo a través de los medios. Mi suegra tiene más de 90 años y vive en una residencia de ancianos. Después de enterarse de que su hijo había sido asesinado, el hombre de cabello blanco despidió al pelinegro y la suegra que perdió a su amado hijo rompió a llorar.