Colección de citas famosas - Colección de poesías - ¿Esperar al conejo es un modismo?

¿Esperar al conejo es un modismo?

1. Ejemplos de “esperar al conejo” en nuestras vidas:

Ejemplo 1:

A y B salieron juntos a pescar a un río salvaje. (No es un estanque de peces). Tan pronto como A llegó al río, inmediatamente colocó el cebo, hizo un nido y luego comenzó a pescar con concentración. B, deambuló por el río por un tiempo y finalmente puso cebo e hizo varios nidos en varios lugares. Después de un tiempo, poco a poco comencé a pescar.

Al ver a B pescando en este nido y pescando en aquel nido, ha capturado varios peces, pero A aún no ha capturado ningún pez.

En ese momento, B le dijo a A: Según el clima de hoy, la temperatura del agua y la dirección del viento, ¿dónde se debe elegir la posición de pesca para hacer un nido? En cuanto a A, aunque respondió tarareando, estaba pensando en su corazón: La última vez pesqué un pez grande en este lugar, tal vez pueda pescar un pez grande hoy también.

Ejemplo 2:

Un hombre compró una acción por entusiasmo y ganó mucho dinero. Así que gastó todo su dinero comprando este tipo de acciones todos los días, con la esperanza de obtener más ganancias. Como resultado, quebró y no obtuvo buenos resultados. La gente decía que era como el granjero de la dinastía Song que simplemente estaba esperando que sucediera algo.

Historia idiomática

"Esperando el conejo" de Han Feizi: En la dinastía Song, había personas que araban los campos. Había una planta en el campo, un conejo pasó y la tocó, se rompió el cuello y murió. Debido a que soltó las malas hierbas y cuidó la planta, esperaba volver a tener el conejo. El conejo no se puede recuperar, pero es la canción de la dinastía Song la que ríe.

Significa que había una vez un granjero de la dinastía Song que tenía un tocón de árbol en su campo. Un día, una liebre que corría muy rápido chocó contra el tocón de un árbol, se rompió el cuello y murió. Entonces el granjero dejó sus herramientas y se quedó junto al tocón día y noche, con la esperanza de conseguir otro conejo. Sin embargo, fue imposible volver a conseguir la liebre y él mismo fue ridiculizado por las generaciones futuras.