Votos matrimoniales del novio a la novia
1. En este momento, Dios será testigo de que te conviertes en mi esposa. A partir de ahora tendrás felicidad. Déjame compartir tu felicidad. Tienes pena, déjame compartirla contigo. Ya sea que estés sano o enfermo, te apoyaré, creceré contigo en el amor y te seré leal durante toda mi vida.
No importa lo difícil o feliz que sea el futuro, estaré a tu lado. No puedo hacerte la persona más rica del mundo, pero intentaré hacerte la persona más feliz. Siempre estaré a tu lado y te amaré por siempre.
3. En este momento, serás mi pareja de toda la vida y la única persona a la que amo. Confiaré y respetaré en usted ahora y en el futuro. Reiremos y lloraremos juntos, y ya sea que el futuro sea bueno o malo, difícil o feliz, estaré contigo en todo momento.
4. En este momento estoy muy emocionado. Realmente he estado esperando este momento durante mucho tiempo. La mayor felicidad de mi vida es encontrarte entre la gran multitud. La gente suele decir que ser amado es una especie de felicidad y que es el destino lo que nos une estrechamente. Aquí quiero decirte esposa, es genial enamorarme de ti. Créeme, te haré feliz.
La promesa del novio a la novia
1. Muchas gracias por su apoyo silencioso a mis espaldas, para que no tenga preocupaciones y pueda trabajar duro con confianza. Haré todo lo posible para pasar tiempo contigo en el futuro y cumplir con mis responsabilidades como esposo. Te amo y espero envejecer contigo y tener muchos hijos.
2. Gracias por llegar a mi vida y darme la oportunidad de ser tu esposo. Aunque ahora no puedo darte una buena vida material, no te daré menos amor que a nadie. No importa ahora o en el futuro, te apreciaré, lloraré contigo, reiré contigo y seré tu mejor marido.
3. Cuando me case contigo, seré leal a ti y a mi familia. Este es un compromiso que un hombre debería tener. Te lo prometo a ti y a tus amigos y familiares aquí.
4. Gracias por llegar a mi vida y convertirte en mi amante. Te confiaré mi vida y de ahora en adelante dependeré de ti para ser rico o pobre, en la enfermedad o en la salud. Siempre estaré a tu lado, acompañándote durante cada primavera, verano, otoño e invierno, día y noche, atravesando el viento y la lluvia contigo y sintiendo el arcoíris juntos.