Napoleón fue exiliado a una isla desierta y no tenía seguidores cercanos a su alrededor. ¿Por qué podría regresar?
Creo que la respuesta a esta pregunta hay que analizarla en función de los antecedentes históricos de aquel momento.
Después de comprender ese período de la historia, descubriremos que después del exilio de Napoleón, Francia básicamente regresó a la era feudal, donde la iglesia controlaba el poder y el pueblo no tenía vida.
En segundo lugar, Napoleón vio que había llegado el momento y decidió regresar. En la noche del 26 de febrero de 1815, Napoleón condujo a miles de oficiales y soldados en seis pequeñas embarcaciones y evitó hábilmente los buques de guerra reales borbónicos que vigilaban la isla de Elba. Después de tres días y tres noches de navegación, llegamos a la costa sur de Francia el 1 de marzo. Después, Napoleón, lleno de emoción y entusiasmo, pronunció inmediatamente un apasionado discurso en la orilla: "¡Soldados, no hemos fallado! Siempre escucho sus voces. ¡He pasado por muchas dificultades para llegar a donde estamos hoy! Ahora, aquí estamos, en este momento, finalmente estoy de regreso entre ustedes. ¡Ven, luchemos juntos! ¡La victoria te pertenece, el honor te pertenece! ¡Mantén en alto la gran bandera del águila, ve y lucha por nuestra libertad y felicidad! Inspirado por Napoleón, la sangre hirvió.
En segundo lugar, las tropas comenzaron a marchar hacia París. En el camino, muchas personas aplaudieron e incluso se unieron al ejército de Napoleón. La dinastía Borbón envió tropas de bloqueo, y muchas de estas tropas eran las antiguas tropas de Napoleón, por lo que todas se rindieron. De esta manera, Napoleón entró con éxito en París sin disparar un solo tiro. En ese momento, su ejército había aumentado a 15.000 personas. Al ver que la situación había terminado, Luis XVIII huyó de París presa del pánico. Al final, Napoleón volvió al trono entre la alegría de todo el pueblo.