Poemas modernos que elogian a los docentes en el Día del Maestro
Se acerca el Día del Maestro. Querido maestro, tu amor sincero ha despertado tanta confusión, ha alimentado tanta confianza en uno mismo, ha encendido tanta juventud y ha destruido tantas velas. A continuación, he recopilado algunos poemas modernos para elogiar a los profesores en el Día del Maestro. Le invitamos a leerlos.
1. "Hola, Maestro"
La gente compara a los maestros con velas rojas, que iluminan a los demás y se queman a sí mismos.
La gente compara a los profesores con los jardineros, que cultivan melocotones y ciruelas para que florezcan en todo el mundo.
La enseñanza es una carrera noble bajo el sol.
El maestro nos dio el sol de los ideales y el sol de la sabiduría.
El maestro nos guía para emprender el camino de la vida lleno de sol.
El profesor espera que nos convirtamos en el sol del nuevo siglo.
Las palabras del maestro son como lluvia primaveral que alimenta mi corazón.
Los profesores utilizan la lluvia y el rocío del conocimiento para regar nuestro crecimiento.
La suave lluvia primaveral es el cuidado del maestro por nosotros.
Las palabras y los hechos del maestro son como lluvia primaveral que humedece las cosas en silencio.
El maestro está dispuesto a ser una hoja verde y sostenernos como una flor roja.
El maestro es una hoja verde, dispuesta a contribuir en silencio.
El color verde de las hojas simboliza la eterna juventud del maestro.
Cuando seamos como flores en plena floración, nunca olvidaremos la bondad de las hojas verdes.
Los profesores son como grandes árboles, con el cielo azul sobre sus cabezas y la tierra bajo sus pies, beneficiando silenciosamente a la sociedad.
El maestro es un gran árbol que trae al mundo un paisaje primaveral.
El maestro siembra las semillas de la esperanza y nos cultiva hasta convertirnos en un bosque.
Cuando un árbol pequeño crece hasta convertirse en un pilar, recuerda la bondad del jardinero al cuidarlo.
Sí, el entusiasmo del maestro es como el sol, las enseñanzas del maestro son como la lluvia de primavera,
El estilo del maestro es como hojas verdes, la carrera del maestro es como un gran árbol, nuestra los profesores son buenos.
2. "El elogio del maestro"
Eres una vela roja que arde con luz brillante,
Cuánta sangre y sudor has dedicado, y no preguntas por un nombre famoso en la historia.
Esparces el fuego de la sabiduría con tus verdaderos sentimientos.
Igual que el gusano de seda de primavera dedica su vida a la lealtad,
Igual que la ciruela de invierno que canta la canción del comienzo de la primavera.
Cuántas noches a ciegas, cuántas veces las luces siempre están encendidas,
Has estado sentada en tu escritorio en la larga noche,
Añadiendo un cabello precioso a tu cabello negro, el podio de un metro de altura se llenó de risas,
Acortas la distancia entre los corazones con tu amistad.
Tú eres el sol que derrite el hielo y la nieve indiferentes,
Tú eres quien guía a las personas fuera del laberinto de la ciencia.
¡Ah! ¡Glorioso maestro, jardinero trabajador!
La fragancia de melocotones y ciruelas es tu alegría, alma silenciosamente dedicada y desinteresada.
¡Ah! ¡Glorioso maestro, jardinero trabajador!
La fragancia de melocotones y ciruelas es tu alegría, alma silenciosamente dedicada y desinteresada.
3. "Maestro, gracias por su arduo trabajo"
Quién——
nos llevó a personas ignorantes al espacioso aula,
¡Eres tú! ¡maestro!
Has nutrido con tu arduo trabajo y sudor las tiernas plántulas que acaban de brotar en primavera.
¿Quién -
Educarnos a los traviesos
para convertirnos en personas que puedan ser consideradas y ayudar a los demás?
¡Eres tú! ¡maestro!
Tu cuidado es como la suave brisa primaveral.
Calienta nuestros corazones.
¿Quién -
Nos cultivó a los jóvenes hasta convertirlos en adolescentes maduros y sensatos?
¡Eres tú! ¡maestro!
Tu protección nos permite crecer sanamente.
Dar resultados fructíferos en la dorada estación del otoño.
¡Gracias por tu arduo trabajo! ¡maestro!
Gente que trabaja duro bajo el calor y el frío abrasador.
¡Gracias por tu arduo trabajo! ¡maestro!
Gente que dedica su juventud a la nada.
¡Te respetamos mucho!
——¡Gracias por su arduo trabajo, maestro!