Modismos sobre lo que pones.
1. Pon el pez en el mar
(1) Pronunciación idiomática: [? ¿Fang Yureri? ]
(2) Definición idiomática: Es una metáfora de dejar ir al enemigo y dejar atrás las consecuencias.
(3) El origen del modismo: "El pez en la tetera de Liu Bei es el tigre en la trampa. Si no pescas el pez en este momento, si lo sueltas en el mar , el tigre volverá a la montaña."
2 .Pon el dragón en el mar
(1) Pronunciación idiomática: [? fàng lóng rühi? ]
(2) Definición idiomática: es una metáfora de dejar ir al enemigo y dejar atrás los problemas.
(3) Origen del modismo: El modismo "Que el dragón descienda al mar" proviene de un pasaje del antiguo clásico literario chino "El romance de los tres reinos", que advierte a la gente que no relajen su vigilancia, de lo contrario habrá un sinfín de problemas.
(4) Uso de modismos: este modismo se puede utilizar en diversas situaciones, no solo en guerras y luchas. También se puede utilizar para describir situaciones en las que algún descuido o error puede provocar problemas futuros, no sólo a nivel militar.
Ejemplos de poner dragones y peces en el mar
1. Si dejas ir al enemigo que huye, equivale a ponerte peligros ocultos. Esto realmente mete al dragón en el mar y hace que sea difícil lidiar con él.
2. Dejar libre al delincuente esta vez es como meter un pez al mar. Cuando vuelva a hacer el mal, es posible que paguemos un precio mayor.
3. Su actitud de laissez-faire es como meter un dragón en el mar y causará muchos problemas en el futuro.
En este momento crítico, no debemos dejar escapar a los prisioneros, de lo contrario devolveremos los peces al mar y problemas impredecibles nos perturbarán en el futuro.
5. No podemos dejarnos cegar por los intereses inmediatos. Necesitamos ver claramente las consecuencias de dejar que el dragón se haga a la mar y considerar factores a más largo plazo al tomar decisiones.
6. Al igual que poner peces en el mar, una vez que el enemigo escapa, puede volverse más fuerte en el futuro y representar una amenaza mayor para nosotros.
7. Ya sea en la toma de decisiones estratégicas, la aplicación de la ley u otros aspectos, debemos tener cuidado de no dejar que los dragones entren al mar para evitar problemas interminables.