En la primera mitad, agradécete a ti mismo, en la segunda mitad, sé amable contigo mismo.
Se dice que el temperamento de una persona ahora esconde el camino que ha recorrido, los libros que ha leído y las personas que ha amado. Cada experiencia, buena o mala, moldea quiénes somos hoy.
Las experiencias afortunadas pueden ser por las que todo el mundo ora, pero sólo los accidentes y los cambios pueden despertar a una persona de una vida confusa y hacerle saber que una vida pacífica también es preciosa, y una vida pacífica es porque alguien es llevando la carga por ti.
Se dice que cuando una persona sabe querer a alguien, probablemente sea el momento de marcharse. Sólo cuando pierdes y te vas podrás saber cómo estar agradecido y comprender el valor de las personas que tienes delante.
Y cuando experimentas estas separaciones dolorosas y estas amargas diferencias, lo que dejas atrás es un corazón templado y un coraje incuestionable. Le permitirá no perderse cuando encuentre picos en su vida futura y no menospreciarse cuando llegue a puntos bajos.
El crecimiento de sucursales en sí es un proceso doloroso. Si no lo experimentas, siempre serás débil.
Nadie siempre te protegerá del viento y la lluvia, y la buena suerte no siempre estará de tu lado. Cuanto más te acerques a la mediana edad, más preparado estarás para empezar de nuevo.
Porque la amargura de la vida siempre va acompañada de la eternidad.
Como dijo León en "Black Boy", "La vida ha sido dolorosa, toda mi vida".
No estoy agradecido por el sufrimiento en la vida, sino agradecido por un yo fuerte que surge sólo del sufrimiento. El hombre que apretó los dientes, asumió la responsabilidad y el apoyo de muchas personas y caminó un largo camino.
Que aquellos de nosotros que hemos sufrido durante la mayor parte de nuestras vidas encontremos menos reveses y tengamos más dulzura en la vida. Si no, espero que no se dé por vencido fácilmente sin importar los problemas que encuentre. Cuando persistas, descubrirás que el resultado final de todo debe ser bueno. Si no es bueno es que aún no hemos llegado al final.