No te sobreestimes ni subestimes a los demás.
Sé humilde, sé humilde y camina en el mundo.
He estado buscando y explorando cómo sentirme más cómodo, para que el foco de la vida de cada uno esté en sí mismo.
Siempre nos centramos en nosotros mismos, creando la ilusión de que los demás nos valoran mucho.
En realidad, este no es el caso. Otros están ocupados con sus propias vidas.
Lo que valoras y te importa, a los ojos de los demás, es algo que se olvidará tan pronto como te des la vuelta.
El mundo seguirá desviándose de su verdadera naturaleza. Sólo tus familiares y amigos se preocuparán por ti, pero en el largo río del tiempo, somos sólo un pequeño punto.
Así que no sobreestimes tu importancia en el corazón de los demás.
Al mismo tiempo, no te sobreestimes, pero también comprende correctamente tus habilidades.
Hay muchas personas que son pretenciosas, pero creo que las personas han experimentado algunas tormentas en la mediana edad y tienen cierta comprensión de sus habilidades.
Pensar en tus propias responsabilidades sólo te matará.
Nadie dejará de mirar al cielo, pero deberá mantener los pies en la tierra mientras mira al cielo.
Porque, el llamado no sobreestimarse, por un lado, significa no sobreestimar su importancia a los ojos de los demás, por otro lado, no sobreestimar sus habilidades;
Una persona capaz no se luce, no se luce y no se luce.
No les importa la apariencia externa y prestan más atención a la mejora de sus propias capacidades.
Al interactuar con las personas, nunca subestimes a nadie. No juzgues a una persona por su apariencia. Tan descuidado y grosero.
Las personas excelentes no subestiman a nadie, respetan a todos y mantienen una actitud humilde.
Cada uno tiene su propia forma de vida, y toda forma de vida merece respeto siempre que sea inofensiva.
Por ejemplo, no existe un bien o un mal absoluto en los diferentes estilos de vida de las dos generaciones. Todas son formas de vivir duro.
Tal vez usted mismo no esté de acuerdo con esto, pero las personas capacitadas aprenderán a comprender y buscar puntos en común, reservando las diferencias.
Después de todo, el mundo es muy grande y cada uno es único. Sería mejor si florecieran cien flores.
Las personas fuertes no juzgarán a los demás por su apariencia ni serán agresivas. Siempre respetan a las personas y las cosas que los rodean.
Que todos permanezcan siempre humildes y humildes.
Esperamos sus elogios, comentarios y atención.