El prototipo del Rolls-Royce Wraith se siente incómodo.
En las primeras pruebas durante los cinco años de desarrollo del coche, el interior estaba tan silencioso que la gente se confundió, según Jon Simms, ingeniero jefe de Rolls-Royce. "Repugnante y grosero".
Evidentemente, esto no es bueno para ningún vehículo, especialmente uno que se considera súper lujoso. ¿Cómo resuelven los ingenieros este problema? Simple. Acaban de encontrar una manera de hacer que los autos conduzcan más ruidosamente. Por ejemplo, los ingenieros desarrollaron un sonido suave en el piso de la cabina ajustando el marco del asiento trasero y otros componentes del torso para que vibren a frecuencias bajas específicas. También recalibraron el motor V12 y optaron por no ofrecer modos de conducción revolucionarios como Sport o Track.
Se realizaron otros cambios en la insonorización del interior de las puertas, con capas recortadas del techo acolchado. Pocos fabricantes de automóviles piden interiores más ruidosos, pero Rolls-Royce no es una marca cualquiera. Será muy interesante ver cómo responde la empresa al estado casi muerto de un sistema totalmente eléctrico.
En algún momento de esta década llegará el primer Rolls-Royce totalmente eléctrico y los ingenieros se verán obligados una vez más a encontrar formas de generar ruido en interiores.
Un millón de subvenciones para la compra de coches