De 1634 a 1642, Li Zicheng atacó el condado de Huaiyang (Zhou Chen).
La primera conquista de Zhou Chen fue en noviembre del séptimo año de Chongzhen en la dinastía Ming, que era 1634 d.C.
En aquel momento, la fuerza militar de Li Zicheng no era lo suficientemente fuerte, por lo que unió fuerzas con Gao Yingqun, otro líder del ejército rebelde. Atacaron hacia el este y ocuparon sucesivamente Zhouchen, Lingbao, Sishui, Xingyang y Shangcai.
La segunda conquista de Zhou Chen tuvo lugar en marzo del decimoquinto año de Chongzhen en la dinastía Ming, que era 1642 d.C. En esta batalla, el ejército rebelde mató a Ming Sui, Chen Bingbei, Guan Yongjie y Zhou Zhihou Junyi.
En el segundo año, Li Zicheng envió sucesivamente a Hong y Hui Gong como Chen Xiang. Según la "Crónica del condado de Huaiyang": "Cuando el ejército de Wang llegó a Chenjing, la gente se reunió para responder". Esto demuestra que el ejército de levantamiento campesino obtuvo el apoyo del pueblo. En ese momento, Huaiyang sufrió hambruna durante muchos años. Desde el período Wanli de la dinastía Ming hasta los primeros años del período Chongzhen, ocurrieron cinco desastres importantes: inundaciones, epidemias, hambrunas y plagas de langostas. En la primavera del año 22 de Wanli en la dinastía Ming, se produjo una gran hambruna en Huaiyang. “Las raíces y la corteza de los árboles están siendo devoradas, la gente se come a la gente y los refugiados abandonan a sus hijos al borde de la carretera”. Ésta es la razón fundamental por la que el pueblo de Huaiyang se reunió para responder al levantamiento campesino. En lo que respecta al levantamiento de Li Zicheng, los sucesivos años de hambruna y la desesperada situación de la vida de los agricultores fueron también las razones directas por las que su levantamiento recibió la respuesta del pueblo.
En el decimotercer año del reinado de Chongzhen, hubo una grave sequía en Henan y una gran cantidad de grano costó hasta 10.000 yuanes. Li Zicheng condujo a los rebeldes a Henan y decenas de miles de personas hambrientas siguieron a Li Zicheng. Los rebeldes eran muy disciplinados y no se les permitía entrar a las casas ni vivir en las ciudades. No se les permitió tomar a ninguna otra mujer excepto a sus esposas, cabalgaron hacia los cultivos y fueron decapitadas. Li Zicheng también pudo predicar con el ejemplo. No era bueno en apariencia, no se preocupaba por la comida ni la ropa y compartía alegrías y tristezas con sus subordinados. Por lo tanto, los rebeldes ganaron batallas consecutivas y finalmente capturaron la capital, Beijing. El emperador Chongzhen se ahorcó en el parque Jingshan y cayó la dinastía Ming.