Diez tesoros de la vida

La primera riqueza: una actitud positiva: Una actitud positiva ocupa el primer lugar entre las diez principales riquezas porque toda riqueza, material o de otro tipo, comienza con un estado mental. El corazón es lo único sobre lo que una persona puede controlar total e irrevocablemente su vida.

La segunda riqueza: un cuerpo sano: El cuerpo es la capital de la "revolución", y un buen físico comienza con la "conciencia de la salud". Mantener una actitud positiva, hacer más ejercicio y llevar una dieta equilibrada son las mejores formas de evitar enfermedades.

La tercera riqueza: las relaciones interpersonales armoniosas: Hay dos formas de armonía, a saber, la armonía entre uno mismo y los demás. La responsabilidad principal del individuo es establecer la armonía "interna", mantener una actitud mental positiva y fijarse grandes metas en la vida. Mientras mantengas la paz interior, establecerás fácilmente relaciones espirituales armoniosas con los demás.

La cuarta riqueza: la esperanza de éxito futuro: La esperanza es el mejor de todos los estados interiores. Puede permitir a las personas mantener una especie de fortaleza en tiempos de paz y de crisis. Es la base más profunda de la felicidad humana. Algunas personas no pueden mirar al futuro con esperanza, no creen que se convertirán en la persona que quieren ser, no creen que alcanzarán las metas en las que han fracasado. Como resultado, desistieron de sus esfuerzos y fracasaron.

El quinto tipo de riqueza: el poder de la fe: La fe es el suelo fértil en el jardín interior de una persona, que puede hacer crecer toda la riqueza de la vida y crear la fuente de los pensamientos. La fe es una especie de sustancia espiritual y una especie de poder. La fe es la única manera de hacer pleno uso de la sabiduría infinita.

El sexto tipo de riqueza: el deseo de compartir la felicidad con los demás: Un filósofo dijo una vez: "Si haces cosas por los demás, también harás cosas por ti mismo con las personas que no comparten la felicidad". otros nunca encontrarán el camino a la felicidad. El estatus de una persona en el corazón de los demás depende de los servicios que brinda a los demás a través de alguna forma de compartir. Toda felicidad puede magnificarse varias veces con el simple hecho de compartirla, si puede ser útil a los demás.

La séptima riqueza: Mantener la mente abierta a todo: Mantener la mente abierta a todo y ser tolerante. Esto no es sólo un signo de educación, sino que una actitud interior abierta mantiene a las personas siempre en condiciones de recibir. educación y adquisición de conocimientos, dándoles así mayores posibilidades de éxito.

La octava riqueza: Autodisciplina: La autodisciplina es la mejor manera que tiene una persona de alcanzar el éxito. El estado más elevado de autodisciplina es poder controlarse según ciertas reglas cuando se gana riqueza y estatus, y cuando se reciben elogios y elogios de los demás.

La novena riqueza: la capacidad de comprender a las personas: Las personas que saben comprender a los demás son amables, tolerantes y consideradas. Esta cualidad básica es la base de toda amistad y cooperación armoniosa entre las personas.

La décima riqueza: Seguridad económica: La seguridad económica es algo más que tener dinero. Se adquiere por los servicios que uno presta a otros. Las personas que dominan y aplican la ciencia del éxito tienen seguridad financiera porque tienen los medios para adquirir dinero.