¿Qué es la teología dialéctica?
En el prefacio de Sí o No, Abella responde a la pregunta de por qué las opiniones autorizadas son contradictorias. Su propósito no es negar la racionalidad de las opiniones autorizadas, sino utilizar la dialéctica para ilustrar una mayor exploración de la racionalidad de las opiniones autorizadas. Dijo que tanto los padres de la iglesia como los apóstoles cometieron errores. Por ejemplo, Agustín escribió la Rectificación para corregir sus errores. Sin embargo, su error no fue causado por la fe. Algunos errores resultan de citar autoridades falsas y confiables o de escrituras bíblicas defectuosas. Esta lección le dice a la gente que todas las obras autorizadas "deben tener plena libertad de crítica sin la obligación de aceptarlas sin cuestionarlas. De lo contrario, todos los caminos de investigación quedarán bloqueados y las generaciones futuras utilizarán materiales excelentes para discutir el lenguaje y cuestiones difíciles". también será quitado”. En cuanto a las razones de las contradicciones entre obras auténticas y autorizadas, Abelard dijo que se trata de la diferente comprensión del lenguaje por parte de las personas y la ambigüedad del lenguaje utilizado en las obras de "El Padrino". Las ambigüedades lingüísticas y los malentendidos resultantes son inevitables:
La misma palabra puede tener diferentes significados, a veces usándose de una manera y otras de otra. Un significado se puede expresar con muchas palabras. Esta condición y expresión anormal obstaculizan seriamente nuestra capacidad de lograr una comprensión total. Como suele decirse, la repetición es la madre del aburrimiento, es decir, engendra un severo disgusto. Por tanto, es mejor expresar todo con varias palabras.
Ya sea para verificar la autenticidad de una obra o para eliminar la ambigüedad del lenguaje, la dialéctica es una herramienta lógica que necesita ser examinada. Utilizar la dialéctica para plantear preguntas en forma de argumentos es el primer paso para comprender las obras de los Padres.
Los teólogos conservadores antidialécticos oponen la fe a la razón, dijo Abelardo:
Si creen que aprender una habilidad es un arma contra la fe, entonces sin duda se niegan a admitir cualquier conocimiento. Porque el conocimiento es la captación de la verdad de las cosas... la verdad no se opone a la verdad. La verdad no se opone a la verdad como el error se opone al error, el bien no se opone al bien como el mal se opone al mal, todas las cosas buenas están en armonía; Todo conocimiento es bueno.
"La verdad no se opone a la verdad" es un lema utilizado para conciliar dialéctica, fe, filosofía y teología, en marcado contraste con el lema de Damián "La filosofía es la esclava de la teología".