¿Qué idioma se ha olvidado?
Olvidar que la guerra es peligrosa, las gaviotas olvidar las máquinas, nunca olvidar las instrucciones de la madre, nunca olvidar el año.
No puedo olvidar el acuerdo que hice en aquel entonces, no puedo olvidar la alegría y no puedo olvidar las preocupaciones a largo plazo.
Cada comida olvida lo viejo y lo nuevo, lo viejo y lo amargo y lo dulce.
Nunca olvidaré, nunca olvidaré, nunca olvidaré, nunca olvidaré.
Nunca olvides el sol, olvídate de la comida, olvídate de la vida, olvídate de las serpientes y las colas
Sé olvidadizo, olvidadizo, desagradecido
Al final del año y el A principios de año, no te olvides de tu esposa. No olvides quedarte en Ju.
Olvidar el país y el hogar, olvidar a los antepasados y alejarse, ser desagradecido
Olvidar la propia carrera y los intereses personales, en lugar de olvidarse de los propios pies, hará que el conejo se olvide del elefante.
Olvídate del pescado, olvídate de las tres cosas, olvídate de la comida y sé ingrato.
Ser desagradecido, no distinguir entre lo público y lo privado, y olvidarse de muchas personas nobles.
Las personas nobles son buenas olvidando su propio país, pero olvidan su propio país, sus propios oídos, sus propios logros y sus propios hechos.
Recuerda el mérito, olvida la pérdida, olvida el cansancio, olvida el hambre, olvida la muerte.
No te olvides de las turbulencias, los ahogamientos, las contrainscripciones, las gaviotas y las garzas.
Olvídate de la vida y de las carencias, olvídate de la mitad, olvídate de los beneficios y olvídate de la rectitud.
No olvides el peligro, pero no olvides la ingratitud.
No te olvides de los barrancos, de los años y del orgullo.
Olvidando con orgullo tus palabras, olvidándote de tu comida, olvidándote de tu sueño, olvidándote de tus comidas.
Siento que me he olvidado de mi cuerpo, de mi país, de mi familia y de mi comida.
Olvídate de la comida, olvídate de la vida, olvídate del sexo, olvídalo.
Olvidarse de la comida y del sueño, de sorber almohadas, de ser desagradecido.
Olvida la forma, duerme, come, ama, la vida y la muerte
Olvídate del elefante, olvida la batalla, olvida el cuerpo, olvida el corazón y las manos.
Olvídate del país, olvídate del mundo, olvídate de las reliquias cansadas, olvídate de todo.
Nunca olvides tus preocupaciones por los asuntos públicos, olvida tu vida privada y olvida tus raíces