Tuvo la suerte de nacer en el círculo poético de China.
Qué suerte que el espíritu de Lei Feng caliente los corazones de las personas. Renuncia a la familia pequeña, cuida el país grande y conviértete en un país grande. La propagación de la nueva epidemia de coronavirus ha afectado los corazones de personas de todo el país. Los ciudadanos de Chengde soportaron la presión de las empresas que perdían más de 30.000 yuanes al día e hicieron donaciones desinteresadas a los trabajadores sanitarios y al personal médico que luchaban en el frente de la epidemia. El ciudadano Wen Liwei se enteró de que había escasez de máscaras protectoras en el frente. Luchando contra la epidemia, vendió todas las máscaras utilizadas por la empresa para marketing. Quítatelas y dáselas al personal médico y a los trabajadores sanitarios de primera línea de forma gratuita. A las 3:30 pm del 1 de febrero, un hombre enmascarado que llevaba sombrero y máscara entregó silenciosamente una caja que contenía 1.000 máscaras quirúrgicas médicas, una carta y varios informes de pruebas. El hombre puso la caja sobre la mesa del guía, hizo una reverencia y salió corriendo. La enfermera lo persiguió pero no logró alcanzar al misterioso hombre. Hay muchos ejemplos de personas que hacen esto sin dejar su nombre. Los hijos e hijas de China están contribuyendo silenciosamente a la epidemia y utilizando acciones para rendir homenaje a la perseverancia y la perseverancia de los defensores. Afortunadamente, las grandes potencias pueden sacudir al mundo. Después de 70 años de grandes cambios, ocurre un milagro llamado "China Speed". China, conocida como la "maníaca de las infraestructuras", ha vuelto a hacer grandes esfuerzos, lo que ha asombrado a la gente dentro y fuera del país. ¡Si no hay espacio, creamos espacio! El equipo de ingenieros de Wuhan construyó un nuevo hospital, el Hospital Huoshenshan, en sólo diez días. ¡La velocidad de China es un milagro! Sin embargo, junto con esta velocidad milagrosa, también surgen muchos problemas. Desde un terreno baldío hasta un hospital de enfermedades infecciosas estándar, el proceso no es fácil. Las condiciones de construcción en el lugar son duras, la movilización del personal es difícil y la seguridad y la prevención de epidemias son difíciles, lo que hace que esta intensa tarea sea aún más ardua. Detrás de la construcción de la montaña del volcán está la innovación de la tecnología de construcción de China, la experiencia más rica en la lucha contra la "epidemia" y la fuerza indestructible china que se mantiene unida en las buenas y en las malas.
Durante la epidemia, el pueblo chino hizo todo lo posible. Vienen de todo el país, hablan diferentes dialectos y trabajan duro por el mismo objetivo. Detrás de la lucha contra la epidemia, cientos de millones de personas luchan lado a lado, y la heroica China está unida como una sola, transmitiendo la calidez de una China que no teme al viento ni a las olas, está estrechamente unida y trabaja junta en el mismo barco! ¡Qué suerte tienes de haber nacido en China!