Un ensayo de 800 palabras sobre el tema del crecimiento (con comentarios adicionales)
Los años de crecimiento son como agua corriente, que van y vienen a toda prisa. Antes de que te des cuenta, otro año ha cambiado. Alrededor de nuestros hijos hay felicidad que nutre nuestro crecimiento. Abre la puerta de la memoria, da un paseo por el sendero y recuerda las cosas interesantes de tu infancia. La niña que confiaba en su madre se ha convertido en una niña hermosa, pero nunca olvidará la felicidad de la infancia.
Los recuerdos de la infancia son infinitos, y todo nos alegra y conmueve. Las muñecas, los helados y los carruseles siempre han sido ignorados en nuestras vidas, pero han añadido un poco de felicidad y color a nuestro crecimiento. En medio de la noche, de repente me desperté de mi sueño. Lloro por mi madre. Mi madre decía: "Cuando seas grande, tendrás que ser independiente. Ya no podrás depender de los demás". ¡Quizás esto también sea una prueba en el proceso de crecimiento!
Pasó un año a toda prisa, y cuando sonó el timbre, volví a crecer. Cuando cuento las cosas felices del año pasado, al principio realmente no puedo recordarlas. Pero entonces me vinieron a la mente fragmentos de crecimiento y felicidad. Cada vez que hago mi tarea, mi velocidad es siempre el doble que la de otros estudiantes. Nadie lo ha terminado todavía. ¡Ya estoy leyendo libros extracurriculares!
Y cuando ganas premios en concursos; cuando haces nuevos amigos; cuando recibes regalos durante las vacaciones. Pensándolo bien, en un año tan corto, he agregado tantas estrellas brillantes a mi historial de crecimiento.
Este no es un conocimiento literario que pueda aprenderse mediante "el mar ilimitado del conocimiento", ni es una idea de resolución de problemas que puedan entender los estudiantes de la Olimpiada de Matemáticas. Es tan dulce como un caramelo. También tengo una terquedad inquebrantable y una rebelión traviesa. Manténgase al día con el ritmo de crecimiento y mantenga los años gloriosos.
Me reí entre dientes pensando en esto. No me escapé de crecer, me lo gané todo. Estaba tan satisfecho como un caramelo y no podía esperar a llegar a mi próximo destino feliz.
El ritmo de crecimiento continúa. Él no puede mirar atrás y no necesita mirar atrás. Sólo comprendiendo la alegría de crecer podremos apreciarlo mejor. Al crecer, era como una taza de té, dulce al principio y con un regusto interminable.