Reseña de Milton a los 23 años|Agradecimiento
¡Quítame mis 23 años con tus alas!
Mis años pasan volando, corriendo a toda velocidad,
Pero mi final de primavera no tiene flores.
Tal vez mi apariencia joven esconda la verdad,
De hecho, estoy cerca de la edad adulta;
Mi corazón está lejos de ser maduro,
No es tan sofisticado como mis compañeros.
Pero por muy maduro que sea, rápido o lento,
sigue siendo estrictamente hablando, completamente correcto.
El tiempo y la Providencia guían mi destino,
Si estoy destinado a ser noble o humilde;
Si puedo utilizar libremente esta madurez,
Todo sigue siendo inseparable de la mirada en los ojos de mi maestro.
(Traducido por Tu An)
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Solo 23 sonetos de Milton fueron transmitidos de generación en generación durante su vida. Los primeros siete artículos (incluidos cinco en italiano) fueron escritos cuando era joven, y los 16 restantes fueron escritos accidentalmente cuando llegó a la mediana edad y se unió a la revolución. Este poema "Veintitrés años" probablemente fue escrito por Milton el 9 de febrero de 163165438, cuando cumplía 23 años (algunos críticos dedujeron de la segunda línea del poema que Milton estaba en su segundo cumpleaños). tenía catorce años) fue el último soneto que escribió en su juventud. El poema expresa la preocupación de Milton por el paso de los años y también inyecta sus ideales y objetivos.
Desde su infancia Milton estudió asiduamente todos los libros que pudo conseguir. Mientras estuvo en la Universidad de Cambridge, estudió mucho y fue muy elogiado. Para un joven británico que estudió mucho en el siglo XVII, su plan de carrera ideal era unirse a la Iglesia Anglicana y convertirse en sacerdote. Los padres, familiares y amigos de Milton también esperaban que pudiera servir a la religión estatal y emprender un camino próspero. Pero Milton creía que la religión del estado era corrupta y supersticiosa, y unirse a la religión del estado iba en contra de la conciencia. Es más, su ambición no era llegar a ser sacerdote, sino llegar a ser un gran poeta. Un anciano le habló de esto y trató de persuadirlo de que no estudiara demasiado. Al día siguiente, Milton escribió una larga carta al anciano y adjuntó el soneto "Veintitrés años" escrito no hace mucho al final de la carta como respuesta.
Al comienzo del poema, Milton sintió el paso del tiempo, como si fuera un hábil "ladrón" que, sin saberlo, robaba la juventud de las personas. Esta metáfora siempre ha sido elogiada porque expresa la repentina comprensión por parte de los jóvenes de la fugacidad del tiempo y su conciencia del crecimiento personal. Posteriormente, el clasicista Alexander Pope también imitó esta metáfora del tiempo. Entonces Milton escribió: "Pero mi final de primavera no tiene flores." Estas son obviamente las humildes palabras del poeta, porque Milton ya ha escrito "La mañana de Navidad", "El hombre alegre" y "El hombre meditando" no está exento. "flores". Quizás, en opinión de Milton, estas obras aún estén lejos del objetivo perseguido, por lo que no pueden llamarse "flores". A partir de esto podemos apreciar una vez más la ambición de Milton.
Más tarde, Milton escribió que parecía más joven de lo que era para su edad. De hecho, Milton tenía un apodo cuando estaba en la universidad: "La Dama del Colegio de Cristo". Sus compañeros de clase lo consideraban demasiado refinado, lo que reflejaba desde un lado que su apariencia no era muy madura. Pero la apariencia de juventud no puede ocultar la verdadera edad ni puede usarse como excusa para la inmadurez. Milton sintió una sensación de urgencia al pensar en aquellos que estaban logrando mayores cosas a su edad.
En las últimas seis líneas del poema, el tono de Milton se vuelve serio y firme, en marcado contraste con su anterior lamento y ansiedad por el paso de los años. Milton cree que Dios es justo y desinteresado con todos, no importa cuán maduro sea un individuo (es decir, talento), no importa si llega rápida o lentamente, siempre que pueda usarlo con firmeza y sin arrogancia, entonces Su logro final serán tan grandes ante los ojos de Dios como los que maduraron antes. En su carta a los ancianos, Milton también tomó prestada la metáfora de "trabajar en la viña" del Evangelio de Mateo del Nuevo Testamento: Había un propietario de una viña que contrataba trabajadores para trabajar en la viña. Algunos trabajadores llegaron temprano y trabajaron duro todo el día, mientras que otros llegaron tarde y trabajaron sólo una hora, pero al final todos recibieron el mismo salario. Esta metáfora transmite exactamente el mismo espíritu que las últimas seis líneas.
Esto demuestra que Milton ha decidido trabajar duro en el camino de la poesía y escribir una obra maestra que se transmitirá de generación en generación.
Aunque este camino parece extremadamente difícil para los demás, y Milton no mostró un talento extraordinario a una edad temprana como los grandes poetas anteriores a él, Milton cree firmemente que mientras continúe practicando, tendrá éxito sin importar el éxito o el fracaso. , no importa la adversidad, algo se logrará. La insistencia de Milton en los ideales también nos ha dado gran inspiración y educación en la actualidad.
(Cai Haiyan)