Razones del deterioro de las relaciones chino-filipinas
1. Disputa territorial: La disputa territorial entre China y Filipinas es uno de los principales motivos del deterioro de las relaciones entre ambos países. China y Filipinas tienen soberanía sobre algunas islas y aguas en el Mar de China Meridional, pero tienen disputas sobre la demarcación territorial, especialmente con respecto a las islas y aguas en el Mar de China Meridional. Los dos países mantienen posiciones diferentes sobre la propiedad de la soberanía.
2. Intervención de Estados Unidos: Como país importante en la región de Asia-Pacífico, Estados Unidos mantiene una estrecha alianza militar con Filipinas. En los últimos años, Estados Unidos ha desempeñado un importante papel de intervención en la cuestión del Mar Meridional de China, lo que ha profundizado aún más las contradicciones y tensiones entre China y Filipinas.
3. Cuestiones económicas y comerciales: Las relaciones comerciales y económicas entre China y Filipinas también se han visto afectadas. Los intercambios comerciales y de inversión entre China y Filipinas han encontrado ciertos obstáculos en los últimos años y han estado sujetos a resistencia política y pública en algunas áreas, lo que ha tenido un impacto negativo en la cooperación comercial y de inversión entre los dos países.
4. Cuestiones culturales e históricas: Las cuestiones culturales e históricas entre China y Filipinas también son una de las razones del deterioro de las relaciones entre los dos países. Debido a razones históricas y diferencias culturales, los pueblos de los dos países tienen profundos malentendidos y hostilidad entre sí, lo que ha resultado en oposición y críticas entre los dos países.
5. Respectivas cuestiones políticas internas: La relación entre China y Filipinas también se ve afectada por sus respectivas cuestiones políticas internas, especialmente la relación entre la política exterior y la opinión pública interna. Los líderes de los dos países a menudo necesitan considerar factores políticos internos al manejar las relaciones entre los dos países, lo que puede conducir a políticas conservadoras y antagónicas. Además, las políticas de los dos países son relativamente diferentes y difíciles de conciliar.