Colección de citas famosas - Mensajes de felicitación - Jordan Peterson: Número 10 de las Doce Leyes de la Vida, el dragón debajo de la alfombra, describe claramente el problema

Jordan Peterson: Número 10 de las Doce Leyes de la Vida, el dragón debajo de la alfombra, describe claramente el problema

Este capítulo habla de mirar directamente el problema y no ignorarlo y hacer que se acumule y se amplifique. Sea preciso al describir el problema y manténgase enfocado en el problema que debe resolverse en este momento.

El tema principal de este capítulo sigue siendo continuar la explicación del "Tao" en "orden y caos". El artículo cita una metáfora que compara las dificultades encontradas en la vida con las de un dragón. Si el problema no se resuelve, será como esconder al dragón debajo de la alfombra y dejarlo crecer. El dragón se hará cada vez más fuerte hasta que sea tan poderoso que destruya tu vida. Hay que enfrentarse al malvado dragón cuando aún es joven y destruirlo.

Cuando nuestras vidas parecen ir sobre ruedas y en orden, las personas se encuentran en un estado de comodidad. Pero la vida no puede estar exenta de problemas y dificultades. Esto es como los puntos negros en el pez blanco del patrón Bagua (el orden debe contener caos y viceversa). Es necesario afrontar las dificultades de frente y tener el coraje de resolverlas, porque si se permite que las dificultades se acumulen, el dolor del colapso total al final será mucho mayor que el dolor de esforzarse sin escapar.

En la segunda mitad del escrito, debes describir cuidadosamente tus dificultades, lo que significa que debes concentrarte. El artículo escribe que concentrarse es eliminar información innecesaria, que en realidad es un método más relajado.

La explicación del profesor Jordan es cercana a la vida y el lenguaje es conciso. No hay ninguna sensación pedante de que solo él puede entender el discurso y fingir ser avanzado. Ésta es también la diferencia entre la capacidad de expresión alta y baja. Al igual que las enseñanzas del Buda, sus enseñanzas se pueden transmitir con mucha claridad. Ésta es también la sutileza del lenguaje y es la capacidad que necesito para generar ideas. Mi mayor duda es que parece que no puedo convencer a los demás (la novena regla del profesor Jordan enseña a la gente a escuchar, tal vez yo sea más adecuado como oyente). Poder hablar es también la capacidad de los filósofos para distinguirse de otras disciplinas. El lenguaje del filósofo es siempre muy preciso y las frases parecen tener un toque de poesía pero son extremadamente agudas.