¿Cómo es cuando los sueños se hacen realidad y descubrir que hacerlos realidad ya no trae la misma alegría que antes?
Pensé que estaba muy emocionado, pero cuando llegó ese día, me sentí muy tranquilo.
Cada uno tendrá sus propios sueños y trabajará duro para lograrlos. Pero cuando el sueño realmente se hace realidad, ya no tenemos la emoción que teníamos al principio, sólo un corazón tranquilo y más anhelo por el futuro. Los corazones de las personas siempre son volubles y los sueños que alguna vez tuviste pueden no ser los sueños que tienes ahora.
Cuando era niño, soñaba con ser científico. Cuando crecí, soñaba con ser emprendedor. Después de experimentar un trauma emocional, soñaba con tener a alguien que me amara. En cada etapa, los sueños de todos cambian, pero a veces no prestamos mucha atención a estos cambios.
Porque los sueños son siempre sueños, es difícil entrar en la vida y la vida siempre está cambiando. Es posible que los sueños que alguna vez tuvo no sean sus aspiraciones ahora, y es posible que nunca antes haya pensado en los sueños que tiene ahora.
La vida es un proceso así. Siempre estamos teniendo sueños y perdiéndolos. Pensé que me emocionaría cuando mi sueño se hiciera realidad, pero al final no me quedó más que tranquilidad.
La vida de mis sueños era caminar de la mano de mi amante todas las noches después de salir del trabajo, ir a casa a pasar tiempo con mis padres los fines de semana y, de vez en cuando, ir al parque en familia con gente brillante. sol y viento cálido. Todo parecía tan hermoso.
Este tipo de vida ha entrado silenciosamente en mi vida y ahora he vivido este tipo de vida. Sin embargo, no sentí que existiera tal récord, ni me sentí halagado. Parecía que todo se daba por sentado y sentí un poco de calma en mi corazón.
No puedo decir que esté muy feliz, porque la vida parece llegar a esta etapa; no puedo decir que esté muy emocionado, porque no todo es fácil mirando hacia atrás. En el pasado, ya no es fácil distinguir el bien del mal.
Siempre hay muchos sueños en la vida. Algunos sueños hacen que la gente lo espere con ansias y otros hacen que la gente se sienta desconsolada. Cuando uno de nuestros sueños se hace realidad, de repente nos damos cuenta de que todo se ha vuelto diferente a lo que era antes.
El camino de la vida debe avanzar siempre, y las alegrías, tristezas y alegrías de este camino pueden ser parte del sueño.