¿Cuáles son los usos del antimonio en la industria?
El antimonio se utiliza a menudo como componente de otras aleaciones para aumentar su dureza y resistencia. Por ejemplo, las placas de baterías, las aleaciones para cojinetes, las aleaciones de impresión (tipo plomo), las soldaduras, las cubiertas de los cables y las balas contienen antimonio. La aleación de plomo, estaño y antimonio se puede utilizar como troqueles de estampado de placas delgadas. El antimonio de alta pureza es un elemento dopante para los semiconductores silicio y germanio. El blanco de antimonio (trióxido de antimonio) es uno de los principales usos del antimonio. El blanco de antimonio es una materia prima importante para los pigmentos blancos en esmaltes, pinturas y retardantes de llama. El sulfuro de antimonio (pentasulfuro de antimonio) es el pigmento rojo del caucho. El antimonio en bruto (trisulfuro de antimonio) se utiliza en la producción de cerillas y agentes ahumadores. El antimonio es un mal conductor de la electricidad y el calor. No se oxida fácilmente a temperatura ambiente y tiene propiedades anticorrosivas. Por lo tanto, la función principal del antimonio en las aleaciones es aumentar la dureza y, a menudo, se le denomina endurecedor de metales o aleaciones. Después de agregar distintas proporciones de antimonio al metal, la dureza del metal aumentará y podrá usarse para fabricar armas, por lo que el antimonio se considera un metal estratégico. El antimonio y los compuestos de antimonio se utilizaron por primera vez en aleaciones resistentes al desgaste, aleaciones de plomo para impresión y en la industria armamentista, y son materiales estratégicos importantes. El antimonio se utiliza como catalizador de policondensación en la producción de PET. Las aleaciones y compuestos que contienen antimonio se utilizan ampliamente. Los compuestos de antimonio son retardantes de llama, por lo que se utilizan a menudo en diversos plásticos y materiales ignífugos. Las aleaciones que contienen antimonio y plomo son resistentes a la corrosión y son los materiales de primera elección para la producción de placas de baterías, tuberías químicas y cubiertas de cables. Las aleaciones de antimonio, estaño, plomo y cobre tienen alta resistencia y son extremadamente resistentes al desgaste; son buenos materiales para fabricar cojinetes y engranajes. Los compuestos de antimonio puro y otros metales (como plata-antimonio, galio-antimonio) son materiales ideales para la producción de semiconductores y dispositivos de calefacción eléctrica. El compuesto de antimonio, blanco de antimonio, es un excelente pigmento blanco comúnmente utilizado en las industrias de cerámica, caucho, pintura, vidrio, textil y química. Algunos compuestos intermetálicos de antimonio son excelentes catalizadores en reacciones químicas. Puede catalizar la oxidación del resorcinol a isoquinona y la hidrogenación del ciclohexano. Con el desarrollo de la ciencia y la tecnología, el antimonio se ha utilizado ampliamente en la producción de diversos retardantes de llama, esmaltes, vidrio, caucho, revestimientos, pigmentos, cerámicas, plásticos, componentes semiconductores, fuegos artificiales, medicamentos y productos químicos.