¿Cuáles son los beneficios de estudiar los clásicos chinos?
Optimización de la personalidad, salud física y mental: los niños que leen clásicos con frecuencia desarrollarán buenos hábitos de piedad filial, cortesía, etiqueta y educación. El gusto y la connotación de la vida de los niños se elevarán a un punto de partida más alto, lo que no solo mejorará su salud física y mental, sino que también aumentará sus posibilidades de éxito.
Mejorar la concentración: el entrenamiento regular en lectura clásica desarrollará gradualmente buenos hábitos de lectura de concentración, determinación y sin distracciones, mejorando así significativamente la eficiencia y la calidad del aprendizaje.
Mejore sus habilidades lingüísticas: memorice "Reglamento para los discípulos", "Clásico de tres caracteres", "Clásico de los mil caracteres", "Libro de los cambios", "Las Analectas de Confucio", "Universidad", "El Clásico de la piedad filial" y "Laozi", "La doctrina del mal", "Mencio", "Ilustración literaria" y otros clásicos, la alfabetización del niño alcanzará unas 5.000 palabras. A partir de entonces, los niños pueden escribir y hablar con elocuencia, citar las Escrituras y tener gran profundidad.
La memoria mejora enormemente: al recitar los clásicos con frecuencia, la memoria de los niños mejorará significativamente y los niños mayores de 50 años pueden alcanzar una "memoria fotográfica". Una vez que adquieras esta capacidad de memoria, podrás retener fácilmente conocimientos sobre cualquier tema y mantendrás esta extraordinaria memoria durante toda tu vida.
El interés y la capacidad de lectura mejoran enormemente: la lectura de clásicos ayudará a los niños a desarrollar el hábito de la lectura extensa. Muchos niños que leen clásicos pueden buscar libros activamente cuando tienen entre 6 y 10 años. Un niño que lee unos 10 clásicos antes de los 7 años puede crear el milagro de leer entre 500 y 1.000 libros al año, ampliando así sus horizontes y rebosando sabiduría, que es muchas veces mejor que un niño que no lee clásicos.
Promueva la relación entre padres e hijos, los padres y los niños aprenden unos de otros: muchos clásicos a los que los padres nunca han estado expuestos. Por lo tanto, los padres (incluidos los abuelos) que leen con sus hijos no solo pueden promover eficazmente la relación entre padres e hijos, sino que también tienen buenos beneficios para fortalecer el cerebro, fortalecer el cuerpo, aliviar el estrés, eliminar la fatiga y mejorar el nivel cultural.