Como la ética médica de un buen médico
1. Utilice su corazón como lámpara y esté dispuesto a ser el ángel guardián de la vida.
2. Alabo al médico. Lo que aportan es un toque de calidez, una gota de amor, una gota de sudor y un sentimiento verdadero. Lo que sacrifican es su juventud más preciada y lo que obtienen a cambio es la felicidad de miles de familias y la paz de unos propietarios sanos.
3. Deja a ti mismo el sufrimiento, el cansancio y el rencor, y regala felicidad, seguridad y salud a los pacientes.
4. No eres rico, ni siquiera un poco pobre, no eres alto, ni siquiera un poco delgado, no eres glamoroso, ni siquiera un poco humilde, pero usas tu cuerpo débil para proteger la seguridad de un lugar, eres la más hermosa.
5. Quien rescata al paciente del borde de la muerte, quien lo cuida escrupulosamente todos los días, es nuestro ángel vestido de blanco: ¡el médico!
6. Busque un servicio perfecto y sea un amigo cercano de los pacientes.
7. Doctor, gracias por brindarle a su paciente un corazón que late sano.
8. Puede curar todas las enfermedades, ahuyentar las plagas y devolver la vida a las personas.
9. Alabo el amor desinteresado del médico. Frente a pacientes con múltiples personalidades, ofrecen sus sentimientos tan amplios como el mar; ante las dificultades, incluso si sufren grandes agravios, les hablan como ética médica y modelos a seguir.
10. No suelo encontrarte tan hermosa. Los ángeles en la tierra visten túnicas blancas sagradas y estás a cero distancia de la enfermedad en el campo de batalla sin humo de pólvora. En tu puesto habitual, cambiaste tu juventud y años por las sonrisas y el agradecimiento de innumerables pacientes. La normalidad genera grandeza y la dedicación genera nobleza. Tu espíritu es siempre la estrella que brilla en el cielo y tus acciones están llenas de gloria para el mañana. No se puede decir que vuestro gran espíritu haya dado forma al mundo perfecto de la humanidad.