Los estudiantes donaron decenas de miles de piedras a su alma mater para construir una plaza. ¿Qué mensaje escribes?
Cuando éramos pequeños, nuestra alma mater nos dio un valor inconmensurable. Ya sea que se trate de conocimientos profesionales, carácter moral y comportamiento, se han mejorado continuamente y se han influido sutilmente durante la escuela. Cada progreso que logramos se debe al sentido de responsabilidad de los docentes y a su contagiosa capacidad para interactuar con la gente.
Llevo seis años contigo en mi alma mater. Todavía recuerdo la primera vez que me encontré contigo. Tan misterioso. Pasé mi infancia contigo. Nutres mi alma y me inspiras con tu sabiduría. Enriqueces mis sentimientos y pensamientos. Dime cómo comportarme y cómo estudiar. Me presentaste a mi mentor y me hiciste un buen amigo.
Ahora, le doy una piedra a mi alma mater, con la esperanza de que sea imperecedera y enseñe y eduque a la gente. También espero que mi escasa fuerza pueda brindar algo de ayuda a mi alma mater y a sus maestros y estudiantes. . Deseo que mi alma mater mejore cada vez más.