Un mensaje sincero para el maestro, en 50 palabras
El mensaje del maestro tiene aproximadamente 50 palabras
1. Maestro XX, gracias por cuidar de mi familia XXX durante los últimos X años. Bajo tu cuidado y educación, él (ella). ) se ha vuelto mejor que antes. Hemos logrado un gran progreso y todos podemos apreciarlo. Muchas gracias por su arduo trabajo. Le molestaré para que lo eduque en el futuro.
2. Maestra xx, siempre ha sido concienzuda y concienzuda. Cada vez que va al jardín de infancia a recoger a sus hijos, siempre la veo ocupada aquí y allá. desconocido, trabajador, y regado de sudor, humedecido de duro trabajo. Las sonrisas cuelgan de los rostros de los niños; la gratitud fluye hacia nuestros corazones.
3. Hola maestros de xx Kindergarten, gracias por cuidar y nutrir a tus hijos. Nutres los corazones jóvenes de tus hijos con tu actitud amable y tu espíritu altamente responsable. ¡Nos gustaría expresar nuestro más sincero agradecimiento a los líderes del jardín de infantes y a todos los maestros!
4. ¡Además del conocimiento, muchas gracias por su gran cuidado por el carácter, las relaciones interpersonales, la salud y seguridad de sus hijos, etc.!
5. Los gusanos de seda de primavera no se acabarán hasta que estén muertos, y las antorchas de cera se convertirán en cenizas antes de que se sequen sus lágrimas. Maestro, ¡gracias por su arduo trabajo! ¡Gracias por cuidar y cuidar a sus hijos!
6. El gusano de seda de primavera nunca ha dicho nada orgulloso de sí mismo en su vida, y el hilo de plata que escupe es la regla para medir el valor de la vida. Querido maestro, nunca te has alardeado frente a los demás, pero los melocotones y ciruelas en flor son el mayor elogio para ti.
7. Desde la sonrisa feliz del bebé cuando llega a casa todos los días, desde los detallados arreglos de enseñanza temáticos semanales, desde la primera conferencia de padres y maestros a la que asistimos y desde las hermosas fotos de Año Nuevo del bebé que recibimos, Lo sabemos: para brindarles a sus hijos una buena educación de iluminación y para su crecimiento continuo, han estado trabajando duro.
8. Cuando recogemos los frutos de la cosecha, lo que te dejas son cabellos grises y blancos en las sienes. ¡Un saludo, querido maestro!