La deshonestidad del gobierno debe abordarse junto con el descubrimiento político. ¿En qué plataforma deberíamos sentarnos juntos?
El abuso de confianza del gobierno se refiere al abuso de confianza de las agencias gubernamentales y su personal en sus actividades profesionales.
En la vida política, el abuso de confianza del gobierno se divide principalmente en abuso de confianza aleatorio y abuso de confianza intencional, denominados colectivamente abuso de confianza subjetivo del gobierno, que se manifiesta principalmente en los siguientes aspectos: Primero, fracaso en la toma de decisiones del gobierno. Algunos gobiernos locales no han establecido un mecanismo científico y razonable para la toma de decisiones. Ignoran las condiciones locales reales y dependen enteramente de la voluntad de unos pocos líderes para tomar decisiones arbitrarias y ciegas, lo que afecta gravemente la naturaleza científica de la toma de decisiones y la debilita. la seriedad de la toma de decisiones.
Además, debido al fenómeno de que algunos nuevos funcionarios ignoran asuntos antiguos y no reconocen deudas antiguas, las políticas gubernamentales cambian constantemente y carecen de estabilidad y continuidad, lo que resulta en la pérdida gradual de credibilidad del gobierno en los corazones. del pueblo.
En segundo lugar, la implementación de políticas no está en forma. La prohibición de entrada a los bancos es la manifestación más directa del crédito gubernamental. Sin embargo, en el proceso de implementación de políticas, algunos cuadros dirigentes locales y departamentales "prestan atención a las órdenes de sus superiores, hablan de medidas en papel y actúan en reuniones" y aprovechan al máximo lo que les resulta beneficioso. Por el contrario, adoptan un enfoque político desde arriba y contramedidas desde abajo, ya sea apoyo suave o resistencia dura, o eludiendo responsabilidades, lo que resulta en una implementación de políticas ineficaz y distorsionada y, en última instancia, en la incapacidad del gobierno para cumplir sus promesas al pueblo.
El tercero es la mala conducta del gobierno. Las funciones de algunas agencias gubernamentales locales no se han transformado completamente y no existe una autoridad funcional clara. El fuera de juego, la mala colocación, la inacción y el comportamiento aleatorio son fenómenos graves. Si no lo logran, no deberían ceñirse a ello. Del mismo modo, quieren ser tanto "árbitros" como "atletas" para dominar el mundo e interferir fácilmente en campos microeconómicos productivos y competitivos, lo que lleva a la búsqueda de rentas del poder, fomenta la corrupción y afecta gravemente la credibilidad del gobierno.
En cuarto lugar está la distorsión de la información gubernamental. Por ejemplo, para exagerar el desempeño laboral, algunos gobiernos locales informan deliberadamente falsamente indicadores numéricos del desarrollo económico nacional para proteger su propia imagen, ocultan o distorsionan deliberadamente la divulgación de información sobre grandes crisis públicas, lo que resulta en una grave asimetría de información; entre el gobierno y el público, lo que lleva a la distorsión de la información pública.