El daño de la violencia doméstica a los niños: la pérdida de una infancia feliz
Pérdida de la inocencia
Los niños que a menudo son golpeados solo se asustarán al enfrentarse a sus padres y perderán la inocencia. Se vuelven sumisos a Nono y sólo obedecerán si está bien o mal. Este tipo de entorno de crecimiento les hace perder la capacidad de pensar de forma independiente.
No sé qué hacer
En una familia llena de peleas, los niños son las víctimas más inocentes. No entienden por qué sus padres están peleando. El ruido de altos decibeles los abrumó. Algunos niños incluso recurren a la autolesión para llamar la atención de sus padres o para que dejen de discutir.
Impacto profundo
La violencia doméstica tiene un impacto profundo en los niños. Pueden desarrollar baja autoestima e inseguridad y les resulta difícil establecer relaciones armoniosas con sus padres y futuras parejas. Peor aún, es posible que no sean buenos padres, lo que permitirá que esta tragedia se transmita de generación en generación.
Trabajar juntos
Para la próxima generación, debemos trabajar juntos para poner fin a la violencia doméstica y brindar a los niños un ambiente saludable para crecer. Sólo así los niños podrán crecer sanamente y convertirse en talentos útiles.