Una noche de otoño en la poesía antigua de la montaña
Entrar en una casa de montaña
Cuando entré en la casa de montaña, de repente sentí una bocanada de aire fresco. Al vivir en la montaña, no hay bullicio de la ciudad, ni ruido de vehículos, sólo el viento que sopla y el canto de los pájaros. Caminando por los senderos de la montaña, con hierba verde bajo los pies, árboles verdes alrededor y montañas onduladas en la distancia, te sientes como si estuvieras en un cuadro de paisaje.
Sentir el otoño
El otoño es la estación de la cosecha y del marchitamiento. La belleza del otoño está por todas partes en la casa de montaña. Los árboles en las montañas gradualmente se vuelven dorados, rojos y marrones, como si le dijeran a la gente que se acerca el otoño. En el camino de montaña, las hojas caídas bailan con el viento, provocando un ensueño sin fin a la gente.
Prueba la comida en la casa de la montaña
Hay mucha comida deliciosa en la casa de la montaña. Hay verduras silvestres frescas, setas de la montaña y frutas silvestres. Degustar estos manjares no sólo satisface tus papilas gustativas, sino que también te permite sentir los dones y dones de la naturaleza.
El tiempo en la montaña Jingxiang
En las montañas, el tiempo parece ralentizarse mucho. Sin el ajetreo de la ciudad, sin presión del trabajo, sólo tiempo de tranquilidad. Aquí podrás leer tranquilamente un libro, pasear por los senderos de montaña, charlar con amigos y pasar tiempo de calidad con tu familia. Aquí hay una tierra pura, alejada del ajetreo y el bullicio de la ciudad y un refugio para el alma de la gente.
Final
La noche de otoño en la montaña es una bella estampa y una actitud ante la vida. Aquí la gente puede dejar de lado el ajetreo y el bullicio de la ciudad y sentir la belleza y los regalos de la naturaleza. Una noche de otoño en la montaña hace que las personas reexaminen su vida y recuperen la paz y la tranquilidad interior. ¡Caminemos juntos a la casa de la montaña y experimentemos la belleza de una noche de otoño en las montañas!