Los adolescentes envían mensajes de texto alentadores.
1. Estudiantes, utilicen su valentía, sabiduría y perseverancia habituales y avancen hasta el final con firmeza. ¡Así que deja atrás a tus profesores y crea tu propio futuro!
2. Cuando el cielo se mueve vigorosamente, un caballero se esforzará por superarse; cuando el terreno sea bueno, un caballero lo llevará todo con virtud. Los estudiantes son talentos en nuestras mentes y deben tener un futuro brillante. Espero que todos los graduados tengan presente el lema de la escuela, lleven adelante el espíritu escolar y utilicen la ley en beneficio de las personas y la sociedad.
3. La ambición es el brote de un comportamiento noble; ¡rocíalo con perseverancia y florecerá! El piano ideal debe pulsar las cuerdas de la lucha para poder tocar el hermoso movimiento de la vida. Los pájaros son valiosos porque tienen alas y las personas son valiosas porque tienen ambiciones. ¡Espero que los estudiantes tengan grandes aspiraciones y trabajen duro en su futuro!
4. Levanta el mástil de tus ideales, iza las velas de tu fe, zarpa y lucha por la superación personal: ¡zarpa, el barco de la juventud!
5. Los jóvenes que estudian mucho no son estúpidos, son conocedores y reflexivos. Distingue clara y resueltamente, la fragancia de las flores de ciruelo proviene del frío glacial. ¡Espero que mi hija estudie mucho y progrese académicamente!
Introducción del sustantivo:
Alentar, palabra china que se pronuncia gǔlì, normalmente utilizada como verbo. Del volumen 5 de "Notas varias de Yang Guang" de Liu Xianting de la dinastía Qing: Solo sigo las filas, recluto oficiales y soldados, y superviso la guerra terrestre y acuática. Sinónimos de estímulo son: animar, animar, animar, animar. Los sinónimos son: burlarse, ridiculizar, reprimir, reprimir.
La diferencia entre elogios y estímulo
El estímulo se refiere a estímulo y apoyo, y el elogio se refiere a elogiar y promover una cosa o un comportamiento. Cuando un niño hace algo bien y con éxito, la sensación de logro le proporciona la mayor sensación de satisfacción y su corazón se llena de confianza y alegría por el éxito. Sólo necesitamos describir lo que hace bien en un lenguaje sencillo, demostrar que lo entendemos y compartir su felicidad con él.
Los niños quieren nuestra atención y comprensión más que elogios, por eso debemos observar y escuchar más al niño y prestar atención a lo que hace. En resumen, elogiar y animar son ambas formas de elogiar a los niños, pero en general, los expertos recomiendan a los padres: animar más, elogiar menos, describir más y evaluar menos. Esto puede evitar que los niños sean secuestrados por los elogios o que no puedan permitirse el lujo de perder y recurran a cualquier medio necesario para lograr sus objetivos.