Un gato callejero atrapa ratones después de ser adoptado para agradecer a su dueño. ¿Qué otras mascotas has visto que paguen a sus dueños?
En la vida, hay muchos comportamientos similares a cómo las mascotas pagan a sus dueños. Tomemos como ejemplo a los gatos. Además de cazar ratones para agradecer a sus dueños, los gatos también cazan peces, pájaros, saltamontes, etc. Le dará a su dueño toda la comida que le guste y le agradecerá compartiendo su comida favorita. Por supuesto, todas estas son formas para los gatos a los que les gusta salir a agradecer a sus dueños.
¿Segundo,? ¿ahorrar? El dueño está en peligro.
Muchas familias ahora tienen gatos y nunca salen. Estos gatos premian a sus dueños de una forma especial. Por ejemplo, si el dueño no se levanta a las 5 de la mañana, el gato pensará que él es el dueño. ¿Morir? Primero huele el aliento del dueño. Si el dueño aún no se mueve, lo agarrarán del cabello o lo jalarán con sus patas delanteras. ¿ahorrar? ¿Maestro Yu? El fuego y el agua son incompatibles.
En tercer lugar, ¿ser un maestro leal? ¿guardaespaldas?
Para agradecer a sus dueños, algunos gatos nunca abandonan a sus dueños y los seguirán a donde quiera que vayan. Especialmente cuando el dueño quiere ir al baño, pensarán que es un lugar muy peligroso. No se atreverán a dejar al dueño ni por un momento por temor a que el dueño corra peligro al ir al baño.
Además de los gatos, los perros son las mascotas favoritas de las personas. La forma en que los perros pagan a sus dueños es aún más especial. Gritarán a sus dueños en cuanto detecten peligro, diciéndoles que el peligro se avecina.
Por ejemplo, gracias a su agudo sentido del olfato, cuando detectan un terremoto, muerden las perneras del pantalón de su dueño y lo arrastran a un lugar seguro. Si alguien intenta atacar a su maestro, correrá delante y detrás de él para protegerlo. Los perros tienen más formas de pagar a sus dueños que los gatos y, a menudo, se lastiman para mantener a sus dueños seguros.
Las mascotas también tienen un lado lindo. Aunque no puede hablar, puede sentir la amabilidad de su dueño. Siempre recordarán esta bondad en sus corazones. Aunque no sé lo que le gusta al dueño, siempre me gusta darle lo que me gusta y agradecerle a mi manera única.