¿Qué opinas del comportamiento ballenero de Japón?
La caza de ballenas japonesa ha sido famosa a nivel internacional durante mucho tiempo, pero ¿por qué los japoneses insisten en cometer el crimen y cazar ballenas de todos modos?
Lo primero que hay que decir es que a los japoneses en realidad no les gusta comer carne de ballena, y comer grandes cantidades de carne de ballena no es una tradición japonesa. Fue sólo por la falta de proteínas en Japón. Después de la Segunda Guerra Mundial cazaron ballenas en grandes cantidades. Con la mejora actual del nivel de vida, la mayoría de los japoneses no elegirán la carne de ballena, que no es deliciosa. Según las encuestas, sólo alrededor del 10% de los japoneses comen carne de ballena.
Como se muestra en la siguiente figura, el número de caza de ballenas en Japón alcanzó su punto máximo cerca de 1965 y luego disminuyó rápidamente. Al mismo tiempo, hay noticias de que el propio Japón almacena una gran cantidad de carne de ballena congelada, por lo que comer carne de ballena no es la motivación fundamental para la caza de ballenas en Japón. Entonces, ¿cuál es la razón que hace que Japón esté tan obsesionado con la caza de ballenas?
El primero es el poder político. Debido a que la industria pesquera en sí es una gran industria en Japón, los profesionales relevantes tienen una gran cantidad de votos. Según las encuestas, actualmente hay alrededor de 100.000 personas trabajando en industrias relacionadas con la caza de ballenas, lo que naturalmente involucra los intereses de muchas personas. Para ganar votos, los políticos, por supuesto, seguirán su propio camino y optarán por convertir la cuestión de la caza de ballenas en oscuridad.
El segundo son los beneficios económicos. Ya sabes, la Agencia de Pesca de Japón proporciona una gran cantidad de subsidios para la caza de ballenas cada año, y los funcionarios de la Agencia de Pesca también serán contratados por estas compañías balleneras después de su jubilación, por lo que es básicamente obvio qué tipo de transacciones turbias existen. Los intereses están en ello, independientemente de si los japoneses quieren comer carne de ballena o si la carne de ballena en el frigorífico se ha terminado, mientras esta cadena de intereses siga existiendo, Japón no dejará de cazar ballenas.
Por supuesto, Japón puede tener otras razones para cazar ballenas, como matarlas para evitar que compitan con el atún por el alimento, etc. En resumen, no importa cuál sea el motivo, la caza de ballenas es un acto innecesario y dañino para el medio ambiente, y alguien realmente debería encargarse de ello. Japón no debería actuar imprudentemente en nombre de la llamada caza científica de ballenas.