¿Cuáles son las características y manifestaciones básicas de una personalidad acusatoria?
1. Comportamiento: acusación, ataque, expresión de ira, intimidación, crítica y control.
2. Palabras: Todo es culpa tuya. ¿Qué estás haciendo? Nunca haces nada bien. Tengo toda la razón.
3. Emociones principales: ira, frustración, insatisfacción, dolor reprimido, miedo a perder el control, soledad.
4. Escultura corporal: endereza la espalda, señala a los demás con un dedo, coloca la otra mano en la cintura, frunce el ceño y tensa los músculos faciales.
5. Autoconcepto: baja autoestima, fracasado, distante de sí mismo, falta de control, indefenso, centrado en las expectativas de los demás.
6. En la vida diaria: Tienes algunos malos pensamientos o malos hábitos, y acusas a otros de tener esos pensamientos o malos hábitos, o describe tu personalidad, características, actitudes, ideas, etc. inaceptables. Deseo se transfiere a otros.
7. Evitar la responsabilidad: este mecanismo puede proteger la paz interior del individuo, pero afectará la capacidad del individuo para observar y juzgar las cosas correctamente, causar fácilmente problemas en las relaciones interpersonales y carece de un efecto constructivo en el individuo. .
8. Proyección periférica: Se supone que las características psicológicas y conductuales que existen en uno mismo también existen en los demás.
El trastorno de personalidad del acusado
Desde el punto de vista psicológico, culpar siempre a los demás es también un trastorno patológico de la personalidad.
Estas personas suelen ser crueles con sus parejas, amigos y familiares. La razón es que los pacientes con una personalidad acusatoria estarán demasiado concentrados en sus propios sentimientos, ignorarán a los demás y tendrán dificultades para comunicarse.
Satya, el primer experto en terapia familiar en Estados Unidos, cree que la comunicación puede estar compuesta por tres elementos: uno son los propios sentimientos, el otro son los sentimientos de la otra persona y el tercero es el entorno de comunicación. .
Los pacientes con trastorno de personalidad acusatorio sólo se preocupan por sus propios sentimientos a la hora de comunicarse, insisten en su propio enfoque correcto y no escuchan las opiniones de otras personas. Sólo piensan en cómo "derrotar completamente a la otra parte" y hacer que la otra parte admita la derrota, y simplemente no pueden ponerse en su lugar.