Nos gustamos, pero no siempre respondemos cuando le enviamos mensajes. Generalmente es la mujer quien toma la iniciativa. ¿Qué debo hacer?
Si quieres cambiar el status quo, debes cambiar tu enfoque. Tienes que ajustar el equilibrio de la balanza, reducir adecuadamente el número de veces que tomas la iniciativa y reducir tus esfuerzos. Cuando lo sienta, se pondrá ansioso y acudirá a ti. Si es así significa que te tiene en su corazón, por lo que debe mantener este estado de equilibrio.
Si reduces el número de iniciativas, él sigue igual, es decir, no le gustas mucho, por lo que necesitas seguir reduciendo esfuerzos y encontrar ese punto de equilibrio.
Si tu esfuerzo se reduce a casi ningún contacto y él permanece indiferente, podrás saber quién es, pero hay un último truco. Si te haces amigo de otro hombre y lo estimulas, él cambiará de opinión y acudirá a ti, y podrás empezar de nuevo. Si este truco no funciona, no funcionará.
Si realmente no funciona, en realidad existe un último recurso, que es no contactar contigo después de la ruptura. Consigue un amigo cercano, alguien con quien puedas hablar, cuéntale todas tus buenas intenciones, cuéntale todo y dale una última oportunidad. Si se despierta, vendrá a ti. Si esto no funciona, realmente no funciona.
Si llegas a este punto, él acudirá a ti en busca de tu riqueza en el futuro. Por mucho que te pida, se negará rotundamente. Esta persona ya no es confiable.