Poesía sobre mí y mi patria
China despega como un dragón. Que vueles cada vez más alto, brilles con el sol y la luna, vivas para siempre como una estrella y seas tan brillante como una estrella.
El mar canta con el sonido de las olas, las montañas dan testimonio con sublimidad, y la tierra jura con silencio: China, estoy orgulloso de ti.
La patria es el faro en nuestro corazón, que ilumina nuestro camino a seguir; la patria es la fuente de nuestra confianza en nosotros mismos y nos da una fuerza infinita.
Somos China y China somos nosotros. ¡Asumimos con valentía nuestra misión y deseamos a nuestra patria un futuro mejor!
El turbulento río Yangtze levanta ondas de cristal y los miles de kilómetros de luz hacen eco del conmovedor sonido del matouqin. ¡Los hijos e hijas de China rinden homenaje a la patria!