Mi profesora y yo redactamos un cuento.
En el viaje de mi vida, tengo un mentor muy importante. Él es mi guía académica y el iluminador de mi vida. Él es mi profesor de inglés en la escuela secundaria, el Sr. Smith.
La primera vez que lo conocí fue el primer día de mi primer año en la escuela secundaria. Es alto y sonriente, lo que le da a la gente un sentimiento amable y cálido. Cuando lo vi por primera vez, su calidez y amabilidad me hicieron sentir como en casa. En mi vida académica posterior, sentí cada vez más su encanto personal y su profundo conocimiento. Siempre se tomó la molestia de responder nuestras preguntas y explicó conocimientos gramaticales complejos en un lenguaje fácil de entender. En un ambiente tan relajado y agradable, mi interés por el inglés fue aumentando gradualmente y también logré avances significativos en mis estudios.
Además de brindarme orientación en el estudio, el Sr. Smith también me enseñó cómo llevarme bien con los demás, cómo respetar a los demás y cómo pensar de forma independiente. Recuerdo una vez en la que tenía dificultades con mis estudios y estaba muy deprimido. Se acercó y me dijo en su tono amable pero firme: "No te rindas, cree en ti mismo, puedes hacerlo". Su aliento me hizo salir del hoyo, levantarme y seguir adelante con valentía.
Con el paso del tiempo, el Sr. Smith y yo establecimos gradualmente una profunda amistad. Hablamos juntos de literatura, música y cine en nuestro tiempo libre. Me trató con igual corazón y me hizo sentir comprendido y respetado. Nuestra amistad me hizo comprender lo que es una verdadera relación profesor-alumno. Esta amistad no es sólo enseñanza y aprendizaje unidireccional, sino también comprensión mutua y apoyo mutuo para el crecimiento mutuo.
Ahora entré en la universidad y comencé un nuevo viaje. Pero la figura y el espíritu del Sr. Smith siempre están conmigo. Siempre que encuentro dificultades en el estudio, su aliento y apoyo siempre disipan mi confusión. Estoy decidido a seguir manteniendo una buena relación profesor-alumno, tener en cuenta sus enseñanzas y esforzarme por convertirme en un buen académico y persona como él.
El Sr. Smith es una persona importante en mi vida. Él es mi maestro, mi amigo y mi guía. Sus palabras y hechos me hicieron comprender qué es la verdadera educación: no sólo impartir conocimientos, sino también inspirar pensamientos y guiarnos hacia un futuro brillante. En mi corazón, el Sr. Smith siempre será el profesor de inglés alto, con una sonrisa amistosa, sabiduría y encanto. Tuve la suerte de contar con un mentor que iluminó el camino de mi vida para que ya no estuviera solo en el camino hacia el crecimiento.