¿Es la popularidad de la animación japonesa en China una manifestación de invasión cultural?
Primero, ¿cultura? ¿Invasión? Esta afirmación es realmente seria. En los diccionarios chinos modernos, el significado de la palabra invasivo se refiere principalmente a dos aspectos. Una es la invasión mediante saqueo; la segunda se refiere al acto de entrar por la fuerza sin permiso.
A partir de estos dos aspectos, ¿cómo se llama la animación japonesa? ¿Invasión cultural? Realmente no está bien, porque la animación japonesa no ingresa a China con el propósito de saquear. El derecho a mirar o no está en manos de la audiencia china, y no hay ninguna obligación para que la animación japonesa ingrese al mercado chino. la Administración Estatal de Radio, Cine y Televisión de China. Sin permiso, la animación japonesa no podría prosperar en el mercado chino. Por lo tanto, es un error considerar la popularidad de la animación japonesa en el mercado chino como una invasión cultural.
En segundo lugar, debemos mirar otras culturas nacionales de forma racional y dialéctica. Todos estudiamos política en la escuela secundaria. ¿Cuál es nuestra actitud correcta ante diferentes culturas? ¿Tomar la esencia y descartar la escoria? Deberíamos hacer lo mismo con la animación japonesa, y debemos admitir que la industria de la animación japonesa ha formado un sistema único con sus características nacionales en todo el mundo, y todavía es muy completo y digno de referencia para otros países.
Finalmente, respecto a la popularidad de la animación japonesa en el mercado chino, debemos persistir en una actitud de comunicación y aprendizaje mutuo. ¿Existe un buen lugar para aprender del que deberíamos aprender? ¿Para que lo use? De manera similar, deberíamos exportar activamente mejores obras de arte, dejar que estas obras vayan a otros países y permitir que difundan la cultura nacional china a todas partes del mundo. ¿Es esto lo correcto? ¿Intercambio cultural? ;Al mismo tiempo, este enfoque también favorece más la prosperidad de la cultura mundial.