Colección de citas famosas - Frases motivadoras - La poesía literaria es roja.

La poesía literaria es roja.

"Estoy en la cruz de la poesía" es completarme

Por un ideal antiguo.

Para el cielo y más allá.

Pureza y misterio

Cuando las estrellas duermen

Yo me despierto

Con mi voz sutil

Cuéntale todos los caminantes en el desierto

Esas son sobre la noche

Hermosas leyendas

La luna y las estrellas que nadie ve.

Danza de las Rosas

Poesía

Recité en silencio el lema de la vida.

Que esas almas voladoras

Resurrección en persona viva

Resurrección en hierba verde

Que la poesía

Luciérnagas en este desierto

Parpadeantes

En la cruz de la poesía

Veo el corazón elevado del poeta.

El corazón traspasado por los huecos de la alegría y el dolor

El corazón atado por las vides del mundo

aún brilla.

En la cruz de la poesía

Escucho la triste queja del poeta.

Ella oró con sus manos

Por favor, dejen en paz a la gente.

Todos se dieron la vuelta.

Escuchar poesía

Este lenguaje viene del alma

Para tocar esos

corazones que aún no han sido tocados.

El poeta se abrió en canal.

Fluyen como olas

Vasos

Estoy en la cruz de la poesía.

Lejos de la casa donde nací.

Lo sé

El manzano de casa

ha dado abundantes frutos.

Poeta

¿Eres tú el pájaro cantor?

¿Estás volando desde mi paraíso perdido?

¿Volverás al paraíso que busco?

En este mundo lejano

¿Alguna vez te has sentido solo?

Desde que Adán y Eva fueron exiliados

¿Cuán desolado estaba aquel jardín?

De pie en la cruz de la poesía

Cada hoja en el viento

Esto me duele.

Porque

Cada hoja es una palabra.

Ese es el sonido de la poesía

Poesía

Primavera

Cuando los diez Haizi resucitarán

Tú dormir ¿Cuál es el motivo de que tardes tanto?

Esa noche

En ese momento, levanté mi caballo de viento no para suplicar felicidad, sino para esperar tu llegada.

Ese día, cerré los ojos y de repente escuché el mantra de tu "Canción del Sutra" en la niebla fragante del templo.

Ese día, la pila mani se construyó no para cultivar la virtud, sino para arrojar piedras al lago interior.

Esa noche, escuché a Brahma cantar toda la noche, no para la iluminación, sino para ti, que aún estás vivo.

En ese mes, agité todos los tubos de oración no para la salvación, sino para tocar las yemas de los dedos.

Ese año, me incliné para subir el camino de la montaña, no para verte, sino para estar cerca de tu calor.

He viajado a través de montañas y ríos hasta pagodas en esta vida, no para cultivar la otra vida, sino para encontrarme contigo en el camino.

En ese momento, ascendí a la inmortalidad, no por la inmortalidad, sino por tu paz y felicidad.