Colección de citas famosas - Frases motivadoras - El decreto del gobierno no tiene su origen en Zhongnan

El decreto del gobierno no tiene su origen en Zhongnan

La orden del gobierno no se remonta a Zhongnan y es de la dinastía Ming.

Significa que "las autoridades están inactivas y la gente está indefensa". Significa que el gobierno local no presta atención a los problemas de sustento de la gente, los ignora y no resuelve los problemas que enfrenta la gente. dificultades.

El dicho "Las órdenes del gobierno no pueden salir de Zhongnan" estaba originalmente relacionado con la última dinastía Ming. En ese momento, la corte era corrupta y los problemas de subsistencia de la gente eran graves. Para buscar beneficio personal, los funcionarios locales no solo se negaron a resolver los problemas de subsistencia de la gente, sino que aumentaron la carga sobre la gente. En este contexto surgió este modismo.

Hoy en día, el dicho "Las órdenes del gobierno no salen del centro y sur de China" se ha utilizado ampliamente en la vida real. En la vida diaria, podemos usar este modismo para describir un gobierno o una organización que pierde el tiempo resolviendo problemas y retrasa su resolución, lo que hace que los problemas empeoren.

Se puede decir que el modismo "el decreto del gobierno no sale de Zhongnan" es un producto de la historia y un reflejo de la realidad. Se espera que el gobierno pueda prestar más atención a las cuestiones de sustento de la gente y que los cuadros dirigentes puedan respetar los derechos e intereses del pueblo y mejorar continuamente la credibilidad del gobierno y el sentido de ganancia del pueblo.

La aparición del modismo "Las órdenes del gobierno no pueden salir de Zhongnan" refleja la indiferencia y la indiferencia del gobierno. Para evitar que esta situación ocurra en el centro y sur de China, el gobierno debe prestar atención a los problemas de sustento de la gente y fortalecer los horarios de trabajo.

Resolver en la medida de lo posible los sufrimientos del pueblo y acabar con la inacción del gobierno. Al mismo tiempo, las personas también deben mejorar su propia calidad y saber cómo salvaguardar sus propios derechos e intereses, y no deben dejarse engañar por el fenómeno del abandono.