La afirmación correcta sobre la firma digital es
La afirmación correcta sobre las firmas digitales es que las firmas digitales no se pueden cambiar.
La exactitud de una firma digital depende del uso de un algoritmo de cifrado asimétrico, que normalmente utiliza tecnología de cifrado de clave pública. En el proceso de firma digital, el remitente usa la clave privada para cifrar los datos originales para generar una firma digital, y el receptor usa la clave pública del remitente para descifrar y verificar la validez de la firma digital.
Solo el remitente que posee la clave privada puede generar una firma digital correcta, y el verificador puede usar la clave pública para verificar la autenticidad de la firma digital. Esta tecnología de cifrado garantiza la infalsificación y la unicidad de las firmas digitales.
La inmutabilidad de las firmas digitales significa que una vez que los datos se cifran mediante una firma digital, cualquier modificación de los datos originales hará que falle la verificación de la firma digital. Incluso modificaciones menores a los datos originales cambiarán el valor hash de los datos, lo que hará que la firma digital no pueda verificarse. Esta característica garantiza la integridad de los datos y garantiza que el destinatario pueda saber si los datos han sido manipulados durante la transmisión.
La inmutabilidad de las firmas digitales se logra mediante el uso de funciones hash. Una función hash es un algoritmo que convierte datos de entrada de longitud arbitraria en una salida de longitud fija (valor hash). Durante el proceso de firma digital, los datos originales se introducen primero en una función hash, que genera un valor hash único. Luego, el remitente utiliza la clave privada para cifrar el valor hash y generar una firma digital.
El receptor utiliza la clave pública del remitente para descifrar la firma digital y obtener un valor hash e ingresa los datos originales recibidos en la función hash nuevamente para generar un nuevo valor hash. Si los dos valores hash son iguales, significa que los datos no han sido modificados y la verificación de la firma digital ha pasado.
En general, la inmutabilidad de las firmas digitales es una característica importante para garantizar la validez y la integridad de los datos de las firmas digitales. Garantiza que en las comunicaciones digitales, el destinatario pueda estar seguro de que los datos recibidos no han sido manipulados, mejorando así la seguridad y fiabilidad de las comunicaciones digitales.