Déjate llevar y reconcíliate contigo mismo
A veces, es más difícil perdonarse a uno mismo que perdonar a los demás. El verdadero perdón es cuando llegamos a un acuerdo con nuestro yo interior.
En el tercer año de Yuanfeng, Su Shi fue degradado a enviado adjunto de Entrenamiento de la Liga Huangzhou debido al "Caso de Poesía Wutai" y sufrió el mayor revés de su vida.
Su Shi, quien fue degradado a Huangzhou, tenía un puesto oficial bajo, era monitoreado día y noche y tenía bajos ingresos, apenas podía mantener a su familia.
Su Shi estaba desanimado y una vez escribió: Siempre lamento que este cuerpo no sea mío, ¿cuándo olvidaré a Yingying?
Se odia a sí mismo. Odio tener ambiciones vacías, pero debido a un error momentáneo, perdí la oportunidad de mostrarlas; odio haber lastimado a mi familia y amigos debido a mis palabras abiertas. También odio estar en las montañas y los ríos; , pero no puedo calmarme y cultivar mi naturaleza, y siempre me preocupo por la fama y la fortuna.
Al estar exiliado a las montañas verdes y las aguas verdes, este arrepentimiento y enredo quemaba su corazón todo el tiempo.
A menudo se emborrachaba tanto que perdía el conocimiento y apenas podía aliviar su tristeza.
Más tarde, hasta que conocí a Chibi, vi el antiguo campo de batalla y vi que se reían de los grandes logros de los antiguos, finalmente me sentí aliviado, me perdoné y acepté mi situación.
Aró los campos con los agricultores y cantó sus propios poemas adaptados golpeando los cuernos de las vacas con ramas. Confió en su propio conocimiento para mejorar las herramientas agrícolas y proteger a las personas de las enfermedades.
Ya no está atormentado en su corazón, y vuelve a percibir la belleza de "el sabor del mundo es pura alegría", y hace florecer su propio valor.
Está escrito en "Cuatro lecciones de Liaofan": "Todas las cosas del pasado son como morir ayer, y todas las cosas del futuro son como nacer hoy".
> En este mundo, "Nueve de cada diez cosas en la vida son insatisfactorias. "Que las cosas pasadas, sean buenas o malas, se queden ayer. Por el resto de tu vida, no sufras por acontecimientos pasados lamentables.
Déjate llevar, reconcíliate contigo mismo y abraza con valentía el futuro. Aún hay nuevas esperanzas e infinitas posibilidades por delante.