¿Cuáles son los poemas sobre el pueblo mongol?
El amor entre Mongolia y Han es tan profundo que no soportamos despedirnos, y la hierba verde en el fin del mundo habla del sol poniente
El sol Se pone por el oeste, y la puesta de sol enrojece la mitad del cielo, como una niña tímida actuando con coquetería. ¡Las nubes son como fuego bajo la puesta de sol y todo el cielo es colorido y hermoso!
El tiempo pasa como el agua y tenemos que despedirnos de los mongoles. Ambos somos muy reacios a irnos. Tomamos de la mano a los hombres, mujeres y niños mongoles, y los corazones de todos. Juntos, toda la nación está unida y armoniosa. Todos hablaban entre sí, cada uno hablaba con todo su corazón y hablaba libremente, y ninguno quería irse. No sé quién dijo: "Adiós, nos volveremos a encontrar". Luego se subió al auto primero, y los demás se subieron al auto de alguna manera y dijeron palabras similares. En ese momento empezó a llover levemente, como si nos lamentáramos y entristeciéramos por tener que irnos. El aire estaba estancado y había mucho silencio bajo el cielo, a excepción del rugido del motor del auto. En ese momento, todos estaban perfectamente de acuerdo. Nadie dijo una palabra, pero se miraron en silencio, con desgana en sus ojos. Al final, finalmente decidimos romper el silencio y alejarnos. Hombres, mujeres y niños mongoles montaron a caballo para verse durante decenas de millas, luego saludaron y se detuvieron, mirando en éxtasis la dirección del automóvil. Después de esta reunión amistosa, la amistad entre los han y los mongoles se hizo aún más profunda.