Las causas de los acontecimientos de octubre en Hungría
El 23 de octubre de 1956, los estudiantes universitarios de Budapest iniciaron el Incidente Húngaro. A las 12 del mediodía, el Ministro del Interior anunció por radio que se prohibían todas las reuniones y manifestaciones públicas, pero los estudiantes se hicieron oír aún más. Pronto, la radio transmitió la noticia del levantamiento de la prohibición, lo que aumentó el desprecio de la gente y el descontento hacia el gobierno. A las 15.00 horas, más de 65.438+00.000 estudiantes partieron de la Academia de las Artes y de la Universidad Técnica hacia la estatua del poeta revolucionario húngaro Petófi y el monumento al general polaco Josef Behm. La gente siguió uniéndose a lo largo del camino y, cuando llegamos al destino, el número de personas había llegado a 200.000. Los manifestantes corearon consignas como "Los húngaros vendrán a nuestro lado", "Expulsen a los rusos", "Arrojen a Rakosi al Danubio" y "Queremos a Nagy". Después de que la marcha llegó al Capitolio, la multitud pidió a Najib que hablara. Después de repetidas persuasiones, Najib se puso a regañadientes al frente del desfile y persuadió a la gente a mantener la calma.
Sin embargo, Gro Erno, que sucedió a Rákosi Matthias como primera secretaria del Partido Popular de los Trabajadores de Hungría, pronunció un duro discurso por radio a las 20:00 horas. Calificó a cientos de miles de manifestantes de "enemigos del pueblo húngaro" y desestimó las acusaciones de relaciones desiguales entre Hungría y la Unión Soviética como "viles mentiras e invenciones hostiles". El discurso hizo que los manifestantes pasaran de estar insatisfechos a estar enojados. A las 9:30, la multitud derribó la estatua de Stalin en la plaza Stalin en el centro de Budapest. Luego, los manifestantes irrumpieron en la estación y exigieron que sus demandas fueran transmitidas a la nación. Rechazados, comenzaron a atacar el edificio de la radio. Comenzó un conflicto sangriento.