Araña: El cielo está lleno de telarañas, escasas pero sin fugas. imitar
Mosquito: A la gente le gusta cantar palabras agudas y hablar de dedicación. Solo les chupé un poco de sangre y dejaron de hacerlo.
Zorro: Engañé la boca del cuervo, pero al final lo que realmente engañó al cuervo fue su propia vanidad.
Caballo: ¿Quién dijo que Bole está delante y el caballo de las mil millas detrás? Chollima escapó solo, no Bole.
Perro: He estado vigilando la puerta toda mi vida y he aprendido una experiencia: la hospitalidad que te brindan los extraños muchas veces contiene malas intenciones.
Pájaro Carpintero: Aunque solo trabajo con una boca, puedo decir con orgullo que nunca he dicho una palabra vacía.
Araña: Mantén bien esta "telaraña", comeremos y beberemos toda la vida.
Perro: El gato no cumplió con su deber y me pidió que pasara a cazar ratones.
Pescado: Sé que algunas personas están pescando, pero todavía tengo que morder el anzuelo uno por uno. ¿Qué es lo que ha cegado la mente de nuestros peces?
Abeja: Hay demasiadas personas en el mundo que codician la "dulzura" de los demás. Tengo que equipar esta "pistola".
Serpiente: Sabes que soy un animal de sangre fría, pero aun así quieres empatizar conmigo con calidez. ¿Qué puedes hacer si no me enseñas?
Ratón: No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti. La gente odia el engaño, pero ¿por qué colocarían una ratonera donde estamos esperando?
Canario: Mi valor se nota en la decoración de la jaula.
Búho: Si juzgas el avance por las palabras, me temo que no avanzaré en esta vida.
Ciempiés: Cuenta cuántas patas tengo. Un caballo tiene sólo cuatro patas. No creo que pueda dejarme atrás.
Caracol: Lo que más odio son las autopistas. ¿Has contado alguna vez cuántos accidentes de tráfico les ocurren cada día?
Cerdo: El resultado de estar dispuesto a ser alimentado es: El que engorde primero tendrá mala suerte.