Poemas sobre la protección de los recursos hídricos
Agua, tú eres la sangre de la tierra.
Sin ti, no habría vida en la tierra.
Agua, tú eres el alma de la tierra.
Sin ti, no habría seres humanos sobre la tierra.
Todos debemos ahorrar agua.
Agua, agua, agua,
Contigo habrá vida en la tierra.
Agua, agua, agua,
Contigo, nuestro mundo tendrá hermosos colores.
El agua es insustituible, cariño,
¡Debemos valorarla!
Cuando la tierra esté verde,
Cuando no haya agua en el río,
Cuando los pájaros no tengan hogar,
Cuando todas las flores se marchiten...
¡Seremos avergonzados!
Su mente es insensible,
Cuyas manos hacen enojar el desastre.
Todos, todos, no seáis mezquinos,
arrodillaos ante vuestros deseos egoístas.
Mira, los árboles fueron talados,
La tormenta de arena hizo llorar al cielo
Mira, las aguas residuales fueron inundadas por el arroyo,
Que el pez libre pierda la dignidad de la vida;
Lo hueles, el aire se llena de un olor desagradable,
Está invadiendo nuestros pulmones sanos...
Cuántas veces las exigencias desenfrenadas
Destruyeron la vegetación de la que dependemos para sobrevivir.
¿Cuántas veces nuestros hogares han sido destruidos por una loca codicia?
Amigos, amigos, despertad pronto,
daos prisa y enviad a la tierra la más sincera confesión.
Baja el hacha para ser levantado,
Deja que los grandes árboles se conviertan en una fortaleza contra el viento y la arena;
Cierra los talleres gravemente contaminantes,
Deja que el agua del manantial riegue las regordetas espigas de trigo;
Derriba las chimeneas que contaminan el aire,
Deja que los pájaros vuelen suavemente y las nubes de colores canten.
Debemos devolver el amor con amor,
respetar sinceramente la naturaleza.
Hoy debemos empezar de cero,
grabar la conciencia ambiental en nuestro corazón.
Usa nuestras acciones y sabiduría,
haz que la hierba sea verde y las montañas y los ríos pintorescos,
haz que el cielo azul sea más azul y haz que las cuatro estaciones sean encantadoras;
Que el campo sea tranquilo, que la ciudad sea hermosa,
que la vida sea armoniosa y el medio ambiente hermoso.
¡Solo así podremos ser dignos de nuestras madres,
dignos de nuestros hijos y nietos!